La Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) asestó un nuevo golpe al crimen organizado, al asegurar 453 paquetes llenos cada uno con un kilogramo de un polvo blanco con las características de la cocaína y que estaban dentro de cajas con los logotipos de la panadería Rifel, en el municipio de San Luis Río Colorado, Sonora. Con este aseguramiento se arrebató a grupos criminales 100 millones de dólares en cargamentos de sustancias ilícitas.
A través de un comunicado, la Sedena destacó que un camión de la empresa We Deliver Express Trucking fue interceptado en un retén militar instalado en el municipio de San Luis Río Colorado, Sonora; en su interior llevaba cerca de media tonelada de cocaína escondida entre cajas de pan.
En un comunicado difundido por la droga fue interceptada en el Puesto Militar de Seguridad Estratégico de Cucapah el pasado 31 de octubre.
En total, fueron revisados 453 paquetes llenos, cada uno con un kilogramo de un polvo blanco. La dependencia subrayó que el camión que transportaba la droga salió de la ciudad de Querétaro y tenía como destino Tijuana, Baja California. La droga y el tractocamión quedaron a disposición de la Fiscalía General de la República (FGR) con sede en San Luis Río Colorado.
En tanto, el chofer de la pasada unidad fue presentado ante el agente del Ministerio Público federal para que se investigue su posible responsabilidad en el delito contra la salud, en su modalidad de posesión y trasiego de drogas.
Asimismo, se informó que este es el segundo aseguramiento de drogas que logra el Ejército Mexicano, luego de que el pasado 28 de octubre, en el mismo retén fue detenido un camión que presuntamente transportaba papayas, pero entre la carga encontraron 936 paquetes rellenos con un kilogramo de cocaína cada uno, equivalente a 63 millones de dólares.
SINALOA
Por otra parte, y en Sinaloa, en el marco de la Estrategia Nacional de Seguridad Pública, el pasado 30 de octubre se logró en Navolato, Sinaloa, el aseguramiento de un laboratorio clandestino para la elaboración de droga sintética.
Con trabajos iniciados por el Centro Nacional de Fusión de Inteligencia (CENFI) dependiente del Centro Nacional de Inteligencia (CNI), personal del Ejército Mexicano se desplegó a inmediaciones del cerro La Mona y al realizar reconocimientos terrestres localizaron un laboratorio clandestino, por lo que establecieron perímetros de seguridad y el resto de la fuerza procedió a revisar el área, asegurando aproximadamente 35 kilogramos de una sustancia granulada con las características propias de la metanfetamina.