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Aunque aún se registran lluvias y oleaje elevado en las costas, las actividades económicas y cotidianas de la región se han reactivado

Quintana Roo retoma su ritmo tras el debilitamiento de Sara

Imagen satelital del debilitamiento y trayectoria de Sara
Debilitamiento de Sara Quintana Roo ha comenzado a retomar la normalidad tras el debilitamiento de la tormenta tropical Sara, que se ha convertido en una baja presión remanente (Conagua)

Quintana Roo, que había estado en alerta ante la llegada de la tormenta tropical Sara, comienza a retomar la normalidad tras el debilitamiento del fenómeno meteorológico. La gobernadora del estado, Mara Lezama, destacó en su último informe que Sara se ha debilitado a una baja presión remanente y su centro se ubica a 35 km al oeste de Sabancuy, Campeche. Aunque aún se registran lluvias puntuales fuertes y oleaje elevado en las costas, la situación ya no representa el mismo peligro que en los días previos.

El sistema, que en su paso por Centroamérica dejó importantes daños, se desplaza hacia el noroeste a 20 km/h y presenta vientos máximos sostenidos de 45 km/h, con rachas de hasta 65 km/h. Las autoridades estatales han alertado sobre los riesgos de inundaciones y deslizamientos de tierra en las próximas horas, aunque el panorama general en el estado de Quintana Roo es mucho más calmado en comparación con la preocupación que generó su llegada.

Desde el inicio del impacto de Sara, el gobierno de Quintana Roo, junto con diversos cuerpos de seguridad y apoyo federal, trabajó de manera coordinada para mitigar los efectos de la tormenta, desplegando brigadas de auxilio en las áreas más afectadas, como Mahahual, y distribuyendo apoyos directos a las familias más vulnerables. “La prioridad es proteger y respaldar a las familias afectadas, no vamos a dejar a nadie atrás”, afirmó la gobernadora Lezama en su reporte.

En las últimas horas, las actividades económicas en la capital del estado han vuelto a la normalidad, con los mercados y comercios abiertos, lo que ha permitido que los ciudadanos retomen sus rutinas cotidianas, aunque con ciertas medidas de precaución por las condiciones meteorológicas. Las lluvias y vientos, aunque más débiles, continúan siendo una preocupación, especialmente en las costas, donde se mantienen alertas por el riesgo de oleaje elevado.

La situación de emergencia en algunas zonas costeras, como el caso de Mahahual, ya está siendo controlada por las brigadas que siguen trabajando para restaurar los servicios afectados, como el suministro eléctrico. Las autoridades estatales han continuado con las labores de supervisión y atención a reportes de encharcamientos y daños a la infraestructura.

A pesar de los efectos de Sara en el sureste del país, la gobernadora Mara Lezama destacó que el estado está avanzando en su recuperación, y reiteró la importancia de mantener la vigilancia ante posibles lluvias y vientos en las siguientes horas. “Nos hemos preparado para este tipo de situaciones y seguimos comprometidos con el bienestar de todas y todos los quintanarroenses”, agregó.

Quintana Roo, como el resto de los estados afectados, ha aprendido de los fenómenos previos y, a pesar de las dificultades que trajo Sara, hoy las comunidades y actividades económicas de la región vuelven a su curso, mientras se siguen tomando medidas para proteger a la población de cualquier riesgo adicional.

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