Un operativo sorpresa en Frontera Comalapa, encabezado por el grupo Fuerza de Reacción Inmediata Pakal en colaboración con la Guardia Nacional, el Ejército Mexicano y la Fiscalía General del Estado, culminó con resultados significativos en la lucha contra el crimen organizado en la región fronteriza de Chiapas.
Durante la intervención, las autoridades catearon casas de seguridad y ranchos vinculados con actividades ilícitas. En uno de estos lugares, se descubrió una bodega donde se fabricaban y almacenaban “vehículos monstruos”, unidades blindadas utilizadas por células criminales en la zona.
El operativo permitió el rescate de ocho personas migrantes, quienes se encontraban privadas de su libertad, así como la detención de tres presuntos delincuentes relacionados con actividades delictivas. Además, se incautaron 15 vehículos ligeros, cuatro vehículos pesados y cinco vehículos blindados tipo “monstruo”, utilizados comúnmente por los grupos criminales. También se recuperaron semovientes, reforzando las acciones para combatir el robo de ganado en la región.
El gobernador de Chiapas, Eduardo Ramírez, destacó que la coordinación entre fuerzas federales y estatales ha sido clave para responder con rapidez y eficacia ante los retos de seguridad en el estado. “La vigilancia permanente es fundamental para garantizar la tranquilidad en las zonas más afectadas por el crimen organizado”, señaló.
Este operativo refuerza los esfuerzos de las autoridades para restablecer la paz en áreas críticas de Chiapas, una región que ha enfrentado desafíos significativos debido a su ubicación estratégica en la frontera sur de México.