En una reveladora sesión de Cabildo en Tlalnepantla, el presidente municipal Raciel Pérez Cruz denunció que más del 70 por ciento del parque vehicular del ayuntamiento se encuentra en condiciones deplorables, prácticamente convertido en chatarra. Esta situación, aclaró, ha generado graves complicaciones en la prestación de servicios básicos, particularmente en la recolección de residuos sólidos en las diferentes colonias del municipio.
Durante la Segunda Sesión Ordinaria, el alcalde cuestionó severamente a la administración anterior, señalando que, a pesar de existir facturas por servicios mecánicos y reparaciones de motor por montos de hasta 80 mil pesos por unidad, la mayoría de los vehículos se encuentran en un estado que pone en riesgo la integridad de los trabajadores que los operan.
En un ejercicio de transparencia sin precedentes, el presidente municipal solicitó la comparecencia de la titular de la Oficialía Mayor, Julia Galindo Tejeda, quien presentó un informe detallado sobre las medidas implementadas para regularizar el servicio de recolección de basura. Este acto marca una diferencia significativa con el gobierno anterior, donde nunca se registró una sola comparecencia de funcionarios.
La Oficial Mayor detalló que actualmente la dirección de Servicios Públicos y Mantenimiento Urbano cuenta con 158 unidades activas, distribuidas entre Tlalnepantla Poniente con 50 unidades y Oriente con 19. Gracias a las gestiones de la actual administración, se han incorporado 24 unidades adicionales en el poniente y 21 en el oriente del municipio.
Como parte de las acciones correctivas, la funcionaria explicó que se han implementado tres estrategias principales: la elaboración de un diagnóstico vehicular exhaustivo, la gestión de comodatos para obtener más camiones compactadores y recolectores, y el inicio de procesos de arrendamiento de unidades adicionales. Además, se ha emprendido una reorganización territorial para optimizar las rutas de recolección.
Un aspecto crítico revelado durante la sesión fue la situación del personal. La dirección de Servicios Públicos cuenta con 781 servidores públicos, de los cuales el 55 por ciento son sindicalizados. La funcionaria señaló como irresponsable la decisión de la administración anterior de otorgar periodos vacacionales extensos que se extienden hasta finales de enero, afectando significativamente el servicio de recolección.
La gravedad de la situación se hace más evidente al analizar las cifras del parque vehicular total. De las 926 unidades recibidas por la actual administración, solo 498 se encuentran activas, y de estas, más del 50 por ciento representa un riesgo para la seguridad de los operadores. Ante esta situación, la Oficial Mayor adelantó que aproximadamente el 70 por ciento de las unidades deberán ser dadas de baja tras un diagnóstico detallado que se realizará en los próximos días.
Los hallazgos presentados serán turnados a la Contraloría Municipal para las investigaciones correspondientes, especialmente considerando la discrepancia entre el registro de 1,026 unidades reportadas en junio del año anterior y las 926 recibidas por la actual administración, sin que exista documentación que respalde las bajas vehiculares.