La Ciudad de México está dando un giro en el manejo de sus residuos con la creación de la Agencia de Gestión Integral de Residuos (AGIR). La titular de la Secretaría del Medio Ambiente (Sedema), Julia Álvarez Icaza, profundiza en entrevista con Crónica sobre los objetivos, retos y beneficios de esta iniciativa que promete transformar la gestión de las 12 mil 454 toneladas diarias de residuos generados en la capital.
Desde su anuncio, se dejó claro que la AGIR representa un “segundo piso” en la evolución del manejo de residuos en la metrópoli. Entre los objetivos de la agencia están los de ser el ente rector de la separación de residuos; unificar atribuciones; impulsar la economía circular para dar valor a los residuos; reducir su generación; disminuir los impactos negativos al ambiente; bajar la emisión de gases de efecto invernadero, y colocar a la Ciudad de México a la vanguardia en gestión de residuos, resalta la titular de Sedema.
–¿Qué significa la creación de la AGIR para la Ciudad de México?
–Este anuncio, realizado por la jefa de Gobierno, Clara Brugada, marca el inicio del “segundo piso” de la transformación en la gestión de residuos en la Ciudad de México. Es un paso crucial, ya que, hasta ahora, no existía un ente rector que centralizara y alineara los esfuerzos de diversas dependencias y alcaldías en este tema tan sensible y prioritario. Esta agencia integrará las atribuciones que actualmente están dispersas entre la Secretaría del Medio Ambiente, la Secretaría de Obras y otras instancias.
Además, su creación envía un mensaje político muy claro: el tema de los residuos, que nos involucra a todos, es ahora una prioridad en la agenda pública. Así como Clara Brugada creó la Secretaría de Gestión Integral del Agua y la Secretaría para la Planeación y Ordenamiento Territorial, ahora se suma esta nueva institución, posicionando a la Ciudad de México a la vanguardia internacional, al nivel de ciudades como Tokio, Bogotá y París, que cuentan con organismos públicos especializados en la gestión de residuos.
–¿Cuál es el contexto de este avance en la gestión de residuos?
–Durante la administración pasada, se lograron avances significativos en esta materia. Se promovió el paso de un modelo de economía lineal, donde los residuos se consideraban basura sin valor, a un modelo de economía circular que fomenta su aprovechamiento. Un hito importante fue la incorporación a la Ley de Residuos de la prohibición de plásticos de un solo uso, que representaban una gran parte de los desechos generados.
También se construyeron dos plantas de selección de residuos, donde se separan materiales para su valorización, y avanzaron los proyectos de plantas para tratar residuos de construcción y demolición. Además, se creó la planta de hidrocarbonado poniente, que procesa residuos orgánicos y de poda para convertirlos en pellets de carbono.
–¿Cuáles son los objetivos principales de la AGIR?
–La AGIR busca transformar por completo el panorama del manejo de residuos en la ciudad. Su lema, “La basura que se separa no es basura”, refleja la esencia de la economía circular: al separar los residuos, dejan de ser basura y se convierten en productos valorizables que pueden reintegrarse a la cadena productiva.
Entre los objetivos específicos, destacan:
1. Implementar una campaña masiva de separación de residuos. Esta campaña, que comenzará en 2025 junto con la operación de la AGIR, buscará involucrar a toda la ciudadanía. Estamos trabajando en un esquema de recolección diferenciada, donde, por ejemplo, ciertos días se recolecten residuos orgánicos y otros, inorgánicos. Este esquema permitirá que los materiales sean más fácilmente reciclables.
2. Renovar el 50% del parque vehicular de camiones recolectores. Aunque la recolección de basura es una atribución de las alcaldías, la propuesta de la jefa de Gobierno incentiva su renovación: por cada camión que adquieran las alcaldías, el Gobierno de la Ciudad aportará otro. Esto es crucial, considerando que gran parte de los camiones tienen más de 25 años de antigüedad y generan altas emisiones contaminantes.
3. Tratar el 100% de los residuos de construcción y demolición. Actualmente, estas 14 mil toneladas diarias terminan en barrancas, lagos o canales, causando graves problemas ambientales. Con la AGIR, se busca reciclar y valorizar estos materiales.
4. Gestionar adecuadamente residuos específicos como las llantas usadas. Hasta ahora, no existe infraestructura pública para el manejo de este tipo de residuos, que suelen acumularse en estaciones de transferencia. Estamos evaluando tecnologías para su tratamiento, así como para los residuos orgánicos, que representan el 55% de los residuos sólidos urbanos.
–¿Qué impacto ambiental se espera lograr?
–Con la operación de la AGIR y sus políticas, esperamos reducir significativamente las emisiones de CO2 y metano. Hoy en día, el 50% de los residuos generados termina en rellenos sanitarios, la mayoría ubicados en el Estado de México. Estos sitios emiten grandes cantidades de metano, un gas de efecto invernadero altamente contaminante.
Al tratar y valorizar los residuos, no solo disminuimos estas emisiones, sino que reducimos nuestra dependencia de rellenos sanitarios y mejoramos la calidad del aire y del suelo en la ciudad y sus alrededores.
–¿Cómo se involucrará a la ciudadanía en esta transformación?
–El éxito de la AGIR depende en gran medida de la corresponsabilidad ciudadana. Por eso, hacemos un llamado a todos los capitalinos para que participen activamente en la separación de residuos. Es fundamental que las familias adopten esta práctica en sus hogares, considerando que el 91% de los residuos sólidos urbanos se genera en domicilios.
Además, la campaña masiva de separación incluirá actividades de sensibilización y educación para explicar la importancia de separar los residuos y cómo esta acción contribuye al cuidado del medio ambiente.
–¿Qué otros proyectos complementarán las acciones de la AGIR?
–La jefa de Gobierno ha anunciado la recuperación de espacios públicos mediante materiales reciclados y bioconstrucción. Esto es parte de su compromiso con la sostenibilidad, como lo demostró en Iztapalapa con la construcción de las Utopías, muchas de las cuales incorporan tecnologías verdes y materiales reutilizados.
También estamos trabajando con la academia y el sector privado para desarrollar tecnologías innovadoras que permitan reutilizar diversos materiales. Por ejemplo, se está evaluando la creación de un parque en Tula, Hidalgo, para el tratamiento de residuos orgánicos.
La AGIR no solo representa un avance técnico y administrativo, sino también un cambio conceptual. Dejamos de hablar de “basura” para referirnos a residuos como recursos con valor.