Más de 200 mujeres al día se acercan al Colectivo DLR para que en tiempo récord extermine todas las fotografías, en su mayoría creadas con Inteligencia Artificial, que sus agresores publicaron y difundieron masivamente en la red para extorsionarlas y acosarlas, debido a que decidieron salir de entornos de violencia o no accedieron a presiones sexuales o de otro tipo de violencia. De acuerdo con los activistas a cargo de esta organización, las víctimas deciden acercarse a estas organizaciones independientes porque no confían en la Policía Cibernética y en el Ministerio Público, ya que sus facultades solamente son preventivas y sus denuncias no proceden porque ese delito ni siquiera existe en las cifras de la Fiscalía.
A diferencia de los largos procesos que tienen que pasar cuando presentan su denuncia en la Fiscalía, Andy Torres, dirigente y “hacktivista” del Colectivo DLR, en entrevista con Crónica expone que en un plazo máximo de 30 días, o en la mayoría de los casos, hasta en la mitad del tiempo, investiga, rastrea y elimina todas las publicaciones que exponen a mujeres en falsos cuerpos que hace parecer que están desnudas, como el caso del exalumno del Instituto Politécnico Nacional (IPN) que modificó imágenes de sus compañeras con fines sexuales y comercializarlas.
Policía no tiene facultades de investigación de delitos cibernéticos
En tanto, denuncian que la Policía Cibernética y en la Fiscalía el personal desconoce cómo actuar para capturar e imputar al responsable de violar su intimidad y todo queda en carpetas de investigación y quejas trabadas que en plena era digital, aun cuando las redes sociales y los smartphones son fundamentales para la vida de las personas.
Al mismo tiempo en que las víctimas no encuentran una respuesta, miles de perfiles en la red social X nacen para intimidar a las mujeres y extorsionarlas, con agresores que sin miedo postean e intercambian imágenes. Mientras la Fiscalía capitalina y la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) mantienen cifras nulas por la persecución de este delito, pues están reservadas, cuentas como “AscoDanPolíticos”, “Peanut la Ardilla”, “Packs de México” y “RexBluePack” que venden fotos modificadas de mujeres, son eliminadas por este colectivo en menos de 48 horas y para evitar que nuevas víctimas
“Las autoridades no tienen la manera de eliminar esta clase de contenidos, parte de lo que es la investigación, las autoridades no tienen una unidad que pueda investigar dentro de un entorno digital; cuando se trata de contenido íntimo, las indagatorias se realizan como cualquier otra. Hay que ir al lugar, hacer preguntas, investigar a los posibles responsables, no hay un seguimiento digital, como el rastreo de una cuenta o la identificación de un perfil, tiene que ver con que la respuesta que damos, que es eliminar el contenido e identificar al agresor”, dijo Andy Torres.
“No existe una unidad en México que haga esta investigación, las facultades de la Policía Cibernética solamente son preventivas, no de investigación digital. para poder trabajar de la misma manera, no solamente es capacitar a las unidades en la seguridad, sino la manera en laque se aplica la Ley y aplicar los protocolos en los casos; no se trata solo de eliminar un contenido, nosotros lo aplicamos para obligar a las plataformas a que eviten el acceso a los agresores, desde la puerta civil, pero desde una institución pública, sería complicado que intervinieran, habría que reestructurar muchas cosas, porque ellos, cuando intentan solicitar información de una cuenta que realiza una actividad ilegal, la plataforma se niega a visibilizar esos datos”.
Según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), en 2023, a nivel nacional, 20.9 por ciento de la población usuaria de internet vivió alguna situación de acoso cibernético. El porcentaje representa 18.4 millones de personas de 12 años y más. La mayor prevalencia de ciberacoso se registró en Durango, con 28.8 por ciento; siguieron Oaxaca y Puebla, con 25.5 y 25.0 por ciento respectivamente.
Las entidades con menor prevalencia fueron Guerrero, con 17.4 por ciento y Sinaloa y Ciudad de México, ambas con 17.6 por ciento. Durante 2023, 61.7 por ciento de la población de 12 años y más víctima de ciberacoso desconocía a la persona acosadora; 23.4 identificó sólo a personas conocidas y 14.8 señaló haber sufrido ciberacoso tanto de personas conocidas como desconocidas. De la población de hombres de 12 años y más que fueron víctimas de ciberacoso que pudieron identificar el sexo de las personas agresoras, 60.4 por ciento indicó haber sido agredido solo por hombres. Las mujeres que fueron víctimas de ciberacoso y que pudieron identificar el sexo de las personas agresoras, 53.0 por ciento manifestó haber sido agredida solo por hombres.
En las facultades de las autoridades no está eliminar perfiles de agresores, ni que con investigación o inteligencia abran carpetas de investigación por esta falta; solamente se limitan a atender reportes, brindar pláticas informativas de distintos temas cibernéticos, pero no rastrean perfiles de agresores, solamente hasta que existe un reporte. Las recomendaciones de la Policía Cibernética son intermitentes, que su mayoría solamente enlistan “cómo hacer compras seguras en el Buen Fin” o alertar sobre cadenas fraudulentas que exigen dinero, pero la violencia digital está en el último apartado de su sitio web y se limita a infografías que explican el marco legal y está inhabilitada la parte en la que aparentemente se informa a la víctima qué instituciones brindan orientación a la víctima de manera técnica, psicológica y jurídica.
Exhiben lista de agresores
En comparación de las nulas cifras de este delito con las que cuentan las instituciones de justicia, el Colectivo DLR posee una lista pública de 600 agresores, con la finalidad de que a través de un código QR, mujeres conozcan la identidad de los agresores y no sean víctimas de los hombres que a causa de la nulidad de jurídica de esta falta, no pudieron ser juzgados por las autoridades; además, a quienes ya fueron agredidas con la difusión de fotografías íntimas, se les brinda de manera gratuita atención psicológica y acompañamiento jurídico.
“Hemos colocado en la lista de agresores a médicos, ginecólogos, exponerlo ayuda a que no caigan en manos de estas personas. El alcance que tiene cada lista es de alrededor 10 mil mujeres que se mantienen suscritas a los canales donde difundimos estos contenidos. Recibimos alrededor de 200 casos por día, han sido muchas personas a las que hemos atendido y otras que ni siquiera se han enterado, cuando se trata de la eliminación de una plataforma que tenga más de mil carpetas de mujeres expuestas y eliminas el contenido de muchas de ellas no se enteraron”.
“Intentamos resolver el problema que tienen hasta dar un acompañamiento psicológico como la asesoría legal, no solo es borrar el contenido, a diferencia de lo que puede otorgar la Fiscalía, donde se tiene que recurrir a otras instancias, nosotros tratamos de tener todo dentro del colectivo”.
En suma, el colectivo realiza cursos, capacitaciones y conferencias con la finalidad de enseñar, prevenir y proteger ante las amenazas digitales, desde el nivel de primaria, secundaria, preparatoria, universidades, empresas y público en general.