
La Ciudad de México es una de las urbes con más contaminación lumínica a nivel mundial, esta se origina con el uso ineficiente y mal dirigido del alumbrado público, la publicidad luminosa, así como con la iluminación decorativa, lo que representa un problema que afecta de manera directa la calidad de vida de las y los habitantes, así como la salud y el medio ambiente.
El Partido Verde propuso en el Congreso de la Ciudad de México una iniciativa que busca reformar la Ley Ambiental local con la finalidad de mitigar y regular la contaminación lumínica en la capital del país.
Efectos en la salud, ansiedad y obesidad
Fue el diputado Manuel Talayero Pariente, quien presentó una propuesta que busca mitigar los efectos. Destacó que la exposición continua, a ciertas fuentes de luz, genera efectos adversos en la salud humana como dolores de cabeza, fatiga, ansiedad e incluso un mayor riesgo de padecer cáncer y obesidad, por ello la importancia de legislar en la materia.
Principales puntos de la propuesta
Al presentar la propuesta legislativa, Manuel Talayero explicó que se busca incluir en la ley local la definición de “Luz Intrusa” como aquella luz que, proveniente de una instalación, no cumple con la función para la cual fue diseñada y contribuye a la contaminación del entorno nocturno.
Su iniciativa propone establecer que, para realizar una solicitud de Manifestación Ambiental Única, se deberá incluir un programa detallado de aprovechamiento, regulación, mitigación y control de la luz artificial, de conformidad con una Norma Ambiental que deberá emitir la Secretaría de Medio Ambiente de la Ciudad de México.
Y también busca establecer que las autoridades locales adopten criterios claros para la prevención y control de la contaminación lumínica entre los cuales destacan: que el alumbrado público cumpla con estrictos criterios de eficiencia energética; la preservación de las condiciones naturales de la noche, fundamentales para el sano descanso de la población y la protección de la fauna nocturna; y la reducción de la luz intrusa, tanto en entornos naturales como en el interior de edificios.
“Con estas medidas no sólo estaremos protegiendo nuestro patrimonio natural y reduciendo el impacto ambiental, sino también mejorando la calidad de vida de las y los ciudadanos al disminuir los riesgos para la salud asociados a la exposición inadecuada a la luz artificial”, concluyó el diputado local.