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Como parte de los programas que el Gobierno de la Ciudad de México ejecuta para combatir el rezago en la educación universitaria, las autoridades de la capital realizaron la firma de convenios con universidades capitalinas con la finalidad de implementar proyectos en áreas como intercambio académico, investigación, capacitación, asesorías y difusión de la cultura.
Asimismo, presentaron los avances que los institutos como la Universidad de la Salud, la Autónoma de la Ciudad de México y el Rosario Castellanos han tenido desde su creación, donde además de brindar a los jóvenes un espacio para la educación, han contribuido para que planes en el área de la medicina y las ingenierías puedan ser llevados a cabo en la CDMX.
De acuerdo con palabras de los funcionarios de la CDMX, la cooperación entre instituciones es el único medio para hacer de la capital un sitio de innovación y conocimiento, donde la educación es la clave para cerrar brechas de desigualdad en el mundo y establecer un escenario de desarrollo sostenible.
Para reafirmar sus declaraciones, Claudia Sheinbaum, jefa de gobierno de la CDMX, el doctor Arturo Reyes Sandoval, director general del Instituto Politécnico Nacional (IPN) y la doctora Alma Herrera Márquez, directora de la educación superior del Instituto Rosario Castellanos (IRC), firmaron los convenios donde se establece que el IPN, el Instituto Rosario Castellanos y la UACM trabajarán en conjunto tres proyectos en beneficio e interés de la ciudad, pues según las autoridades, este enlace hará posible ampliar las oportunidades educativas para los capitalinos.
La incorporación del Instituto Rosario Castellanos en los tratados de las instituciones educativas permitirá que por medio de la cultura cívica y la paz, se formulen proyectos de investigación y divulgación del conocimiento, los cuales incluirán estudios entre docentes y estudiantes de ambas instituciones, trabajos que derivarán en productos como artículos y libros.
Siguiendo con las relaciones formativas, también se anunció que se estrecharán las relaciones con la Universidad de la Salud (UNISA), cuyos médicos egresados realizaron un papel importante en los puntos más álgidos de la pandemia por COVID-19. La importancia de que dicha institución tenga presencia en el convenio celebrado es que la profesión de el personal de salud se debe de ejercer con perspectiva social, humanista, científica e intercultural. También, la UNISA colaborará con intercambios académicos, investigación, capacitación y divulgación, donde ese flujo de ideas pueda converger en el avance tecnológico y científico que conlleven al bienestar.
Con motivo de su renuncia, la secretaria de Educación, Ciencia y Tecnología e Innovación de la Ciudad de México (SECTEI), la doctora Rosaura Ruiz Gutiérrez dio a conocer los avances más importantes que la Universidad de la Salud y el Instituto Rosario Castellanos han alcanzado durante su gestión, así como también los rendimientos de los programas que junto la academia, el gobierno y el sector fundaron para atender problemas de retraso educativo y científico.
Las Becas Bienestar y Leona Vicario, los planes mejora tu escuela, escuela segura, va seguro, fortalecimiento de lenguaje y pensamiento matemático, son esquemas en el que la población estudiantil y docente está protegida al momento de acudir a la escuela, pues están acompañados por seguros de vida que protegen su estancia y trayectos hacia la institución; por otra parte con los talleres de lenguaje se disminuyó el analfabetismo y la dificultad de los niños para realizar operaciones aritméticas.
Para el fortalecimiento de la educación superior, se puso a disposición de jóvenes deseosos de estudiar una carrera universitaria el Instituto Rosario Castellanos, plantel que promueve el pensamiento crítico y la transferencia de conocimiento, mismo que tiene la oferta educativa de 22 programas de licenciatura, cinco de maestría, dos de doctorado y dos especialidades; donde su matrícula escolar más reciente, ascendió a 54,122 alumnos.
Por parte de la Universidad de la Salud, los estudiantes con intereses en esta área pueden inscribirse a las licenciaturas de medicina general y enfermería, para posteriormente, en conjunto con el ISSSTE ingresar a la especialidad en nutrición.
También se destacaron los programas PILARES y Red ecos, que promueven un modelo de colaboración basado en proyectos conjuntos que plantean soluciones en contra de la deserción escolar; además de promover el arte, educación, saberes, libertad y la innovación.
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