Metrópoli

Proponen nueva Ley de Salud Mental en CDMX; por más tratamientos y ayuda a quien hay intentado suicidarse

Se establecerán evaluaciones anuales de salud mental en el sistema educativo, abarcando estudiantes, personal docente y administrativo

salud mental y adcciones

Se contempla que las personas usuarias de los servicios de salud mental tengan las facilidades de solicitar y recibir una segunda opinión médica para su diagnóstico y tratamiento.

Especial

La vicecoordinadora de Movimiento Ciudadano en el Congreso capitalino, Luisa Ledezma, presentó la nueva Ley de Salud Mental de la Ciudad de México, con la finalidad de priorizar la prevención, diagnóstico, tratamiento y rehabilitación de personas con algún tipo de discapacidad intelectual y psicosocial. Con la detección oportuna de enfermedades mentales, se pretende también evitar situaciones que violen algún derecho humano.

La iniciativa tiene el fin de invalidar la Ley de Salud Mental del Distrito Federal del año 2011, a causa de que desde hace 13 años, no se le realiza alguna modificación y las normativas son obsoletas, discriminatorias y no son inclusivas para grupos vulnerables, además de que no contemplan padecimientos como la ansiedad, ni brindan apoyo a personas que han tenido intentos de suicidio, a pesar de que es una de las recomendaciones emitidas por la Organización de las Naciones Unidas (ONU).

Innovaciones que en la Ley anterior no existían:

La Ley propone que los primeros auxilios para la prevención del suicidio se deben de otorgar en las escuelas y alcaldías, lo que reflejaría el nuevo acercamiento al tema, reorganizaría entornos y ofrecería otra modalidad de atención a la salud mental.

Del mismo modo, se deben proporcionar a la población para recibir atención médica oportuna, un tratamiento personalizado dentro de un ambiente apropiado, además de la procuración del interés superior de la niñez y su derecho a la salud mental en general.

Se contempla que las personas usuarias de los servicios de salud mental tengan las facilidades de solicitar y recibir una segunda opinión médica para su diagnóstico y tratamiento.

También, llevar a cabo, al menos en una ocasión durante cada ciclo escolar, un cribado de la comunidad escolar, incluyendo estudiantes, pero sin dejar de lado a las personas docentes, administrativas y demás personal; para diagnosticar cualquier posible padecimiento de salud mental.

Igualmente, se promueve la eliminación de barreras jurídicas, físicas, materiales, económicas, sociales y culturales para que las personas con alguna discapacidad psicosocial e intelectual pueda acceder plenamente al ejercicio del derecho a la salud mental.

Por igual, regular el diseño e implementación de las bases y modalidades, que permitan garantizar el acceso a los servicios de salud mental en la Ciudad de México, en condiciones de igualdad y no discriminación con un enfoque de derechos humanos y perspectiva de género;

Se tendría la obligación de establecer los mecanismos adecuados para la promoción, prevención, evaluación, diagnóstico, tratamiento, rehabilitación y fomento de la salud mental en instituciones de salud pública de la Ciudad de México, que coadyuven en la prestación de servicios en los términos y modalidades establecidas en la presente Ley.

Se propone definir los mecanismos y lineamientos para promover la participación de la población y de coordinación entre la Federación, la Ciudad de México y sus alcaldías en materia de salud mental, así como con los sectores público, privado y social.

Proporcionar apoyo, cuidados, educación, protección a la salud, alimentación suficiente y adecuada, además de respetar los principios de autonomía individual, independencia, igualdad, no discriminación, y todos aquellos que garanticen la igualdad en el ejercicio de sus derechos.

Toda persona que en la Ciudad de México, haya realizado un intento de suicidio, tendrá Derecho a recibir atención prioritaria por parte de la Secretaría de Salud. De igual modo será para sus familiares y círculo social inmediato, resguardando para todas las personas involucradas en el intento, consumado o no, la confidencialidad de sus datos personales y evitando la revictimización.

Las personas con alguna enfermedad mental tendrán que recibir capacitación y orientación por parte de las instituciones públicas, sociales y privadas; además, podrán participar en actividades culturales, recreativas, deportivas y de esparcimiento, que contribuyan al desarrollo integral de las personas con alguna enfermedad mental.

“Es necesario repensar cómo abordamos la salud mental en nuestra ciudad, no solo como una cuestión de atención a enfermedades, sino como una estrategia integral para proteger los derechos humanos y fomentar una sociedad más productiva y equitativa,” afirmó la diputada Ledesma.