Metrópoli

Reino de extorsión en Tlalpan: Comerciantes denuncian abusos de líder ambulante

De acuerdo con testimonios, Estrada ha utilizado su posición de poder para cobrarle más de 80 mil pesos en el último año por el derecho a mantener su puesto

CDMX

Uno de los lugares de venta de los que dice ser dueño Miguel Estrada en el trébol Pichacho-Ajusco.

Uno de los lugares de venta de los que dice ser dueño Miguel Estrada en el trébol Pichacho-Ajusco.

El comerciante José Armando Salgado Hernández presentó una denuncia penal ante el Ministerio Público de Tlalpan II contra Miguel Estrada, presunto líder del Frente Organizado de Comerciantes Independientes de Tlalpan, acusándolo de extorsión. 

De acuerdo con el testimonio de Salgado, Estrada ha utilizado su posición de poder para cobrarle más de 80 mil pesos en el último año por el derecho a mantener su puesto de tacos de carnitas, pechuga y cecina en la vía pública. Sin embargo, cuando se negó a seguir pagando, Estrada le retiró el espacio bajo pretexto de "castigos" por un supuesto mal comportamiento.

“Estrada me amenaza constantemente con quitarme el lugar si no le doy dinero. Se justifica diciendo que el dinero es para las campañas políticas o cualquier otro pretexto que se le ocurra cuando ve que tenemos buenas ventas. Asegura que él es el dueño de los lugares y que puede hacer lo que quiera con ellos”, relató Salgado en su denuncia.

Miguel Estrada, el denunciado

Miguel Estrada, el denunciado

Miguel Estrada, quien asegura tener poder político en Tlalpan desde que el ex delegado Higinio Chávez lo apoyó para dirigir a los comerciantes en 2009, ha sido señalado en varias ocasiones por extorsión. En 2013, un grupo de comerciantes también presentó una denuncia penal en su contra por hechos similares, pero Estrada logró eludir las consecuencias legales prometiendo devolver el dinero a sus víctimas.

El 14 de octubre de 2013, María Elena Garrido Saldaña, Nicolás Rosas Varona, Rosario Reyes Delgado, Irving González Carpio y César Zacarías Hernández denunciaron que Estrada les retiró sus puestos de trabajo en la inmediación de la tienda Chedraui en Picacho Ajusco. Según sus declaraciones, Estrada, junto a su esposa Lilia López, les exigió entre 15 mil y 20 mil pesos para permitirles regresar a sus lugares. A pesar de haber pagado, los comerciantes fueron nuevamente extorsionados. En un caso específico, uno de ellos pagó 15 mil pesos y, pocos días después, Estrada le solicitó 18 mil pesos adicionales para mantener su puesto.

“El día 8 de octubre nos citó a las ocho de la noche en la Dirección de Vía Pública y nos pidió otra cantidad de 15 mil pesos, amenazando con quitarnos de nuevo los lugares que recién nos había asignado. También nos advirtió que no dijéramos nada, ya que, según él, la administración delegacional estaba al tanto de estos cobros”, relataron los comerciantes en su denuncia de 2013.

Los comerciantes expresaron en aquel entonces su sospecha de que Estrada, en complicidad con autoridades delegacionales, los extorsionaba bajo el pretexto de proteger sus espacios en la vía pública. En su denuncia, declararon: “Manifestamos nuestra intención de denunciar estos hechos ante las autoridades competentes y hacemos responsable de cualquier represalia al señor Miguel Estrada y al señor Wenceslao Sadaí Peña.”

Hoy, once años después, José Armando Salgado Hernández enfrenta una situación similar. Afirma que Estrada le quitó su lugar de trabajo después de que se negó a seguir pagando las cantidades exigidas. “Hace unos días, Carlos Morales, inspector de vía pública de la zona, nos dio permiso para tomar unos adoquines viejos y mejorar el acceso a nuestros puestos, ya que con las lluvias se había formado mucho lodo y la gente ya no llegaba. Al tercer día, Estrada apareció y nos reclamó por haber puesto los adoquines, castigándonos una semana sin vender. Después del castigo, nos dijo que si queríamos el lugar de vuelta, teníamos que pagar 45 mil pesos. Me rehusé porque esa cantidad es un abuso”, comentó Salgado.

El comerciante también teme por su seguridad, ya que Estrada siempre va acompañado de otros vendedores que lo apoyan. “He escuchado que este señor ya ha sido detenido por extorsión a otros comerciantes, pero siempre sale libre. Él mismo se jacta de que, con 5 mil pesos en el Ministerio Público, lo dejan salir. Sabe que cuenta con el respaldo de políticos locales, por lo que nadie lo toca”, añadió Salgado.

Entre las figuras políticas que, según Salgado, apoyan a Estrada, se encuentra Luis Alberto Chávez García, actual diputado e hijo del ex delegado Higinio Chávez.

Comerciantes de la zona de Picacho-Ajusco, que prefieren mantenerse en el anonimato por temor a represalias, han solicitado al Ministerio Público de la Fiscalía de Investigación Territorial Tlalpan que investigue no solo la extorsión que sufren, sino también el destino del dinero que Miguel Estrada les cobra semanalmente. “Queremos saber a dónde va a parar todo el dinero que recolecta Estrada. Nos ha estado exigiendo pagos desde hace años y parece que cuenta con la protección de funcionarios, porque sigue haciendo lo mismo sin consecuencias”, comentó uno de los comerciantes afectados.

La situación en Tlalpan sigue siendo crítica para los comerciantes ambulantes, quienes viven bajo la amenaza constante de perder sus puestos si no cumplen con las exigencias económicas de Miguel Estrada. A pesar de las denuncias formales ante las autoridades, la red de protección política que rodea a Estrada parece mantenerlo intocable, mientras los comerciantes continúan sufriendo extorsiones y abusos en la vía pública.