Reportan muy mala calidad del aire en zonas de CDMX y Edomex
Las autoridades mexiquenses activaron la Fase 1 de contingencia ambiental
Mala calidad de aire en CDMX
De acuerdo con informes oficiales sobre la calidad del aire en la Ciudad de México y el Estado de México, algunas zonas enfrentan una muy mala calidad del aire, especialmente en la alcaldía Gustavo A. Madero, Nezahualcóyotl, Ecatepec y Coacalco, donde se ha declarado un riesgo a la salud extremadamente alto.
En respuesta a esta crisis, las autoridades mexiquenses han activado la Fase 1 de contingencia ambiental, marcando la gravedad de la situación en el Estado de México. Sin embargo, cabe destacar que hasta el momento, la Ciudad de México no ha emitido una alerta, lo que genera incertidumbre entre los habitantes de la capital.
La calidad del aire presenta variaciones significativas por alcaldía en la Ciudad de México. Mientras Tlalpan, Cuajimalpa, Miguel Hidalgo e Iztapalapa disfrutan de una calidad buena, en Benito Juárez, Azcapotzalco, Cuauhtémoc, Iztacalco, Venustiano Carranza y Tláhuac se registra una calidad mala. En el Estado de México, la situación se agrava en localidades como Nezahualcóyotl, Coacalco y Ecatepec, donde se informa de una calidad muy mala.
Las condiciones meteorológicas actuales, con una temperatura promedio de 19°C, humedad relativa del 43% y velocidad del viento de 9 km/h con dirección sureste, no favorecen la dispersión de contaminantes, contribuyendo al empeoramiento de la calidad del aire.
Recomendaciones de Protección Civil
Frente a esta crisis, la Secretaría de Gestión Integral de Riesgos y Protección Civil ha emitido una serie de recomendaciones cruciales. Estas incluyen la restricción de actividades al aire libre, seguir estrictamente el programa "Hoy no circula", y reducir el uso de vehículos al mínimo necesario, fomentando la práctica del compartir automóviles cuando sea posible.
Además, se prohíbe la quema de cualquier tipo de material a cielo abierto y en chimeneas domésticas. La no conformidad con estas directrices aumenta el riesgo de contraer diversas enfermedades respiratorias, desde irritación ocular hasta problemas más graves como asma, bronquitis e incluso infartos.
Protección Civil consideró imperativo que la población tome conciencia de la gravedad de la situación y adopte estas recomendaciones como medidas preventivas no solo para la protección individual, sino como un esfuerzo colectivo para preservar la salud pública y mejorar la calidad del aire en la región. La negligencia podría tener consecuencias a largo plazo tanto para la salud de la población como para el medio ambiente.