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Nuevo intento de Estados Unidos de lograr que Israel deje de bombardear a la población palestina y de negar la entrada de ayuda humanitaria a la Franja de Gaza, sin dejar (pese a sus fracasos) de enviarles armas.
En su décimo primer viaje a Oriente Medio, el secretario de Estado de EU, Antony Blinken, se reunió en Jerusalén con el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, para pedirle que aproveche la muerte de Yahia Sinawar, cerebro de los ataques terroristas del 7 de octubre de 2023, para reanudar las negociaciones con Hamás, en aras de lograr la liberación de los rehenes, a cambio de un alto el fuego que lleve al fin de la guerra.
“El primer ministro enfatizó que la eliminación de Sinwar podría tener un efecto positivo en el retorno de los secuestrados”, dijo la oficina de Netanyahu en un comunicado.
El portavoz del Departamento de Estado estadounidense, Matthew Miller, explicó por su parte que Blinken subrayó “la necesidad de aprovechar la exitosa operación israelí logrando la liberación de todos los rehenes y poniendo fin al conflicto en Gaza”.
Blinken también le expresó (aunque de forma tímida) la necesidad por parte del Estado judío de dar nuevos pasos para aplacar la crisis humanitaria en el enclave y un plan que prevea el futuro de los palestinos una vez concluida la contienda, sin hacer alusión a la ofensiva de los colonos judíos ultras de volver a ocupar la Franja de Gaza y expulsar a sus habitantes palestinos.