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La cantante Beyoncé expresó su apoyo a la vicepresidenta Kamala Harris en un multitudinario acto en Houston, su ciudad natal, pidiendo a los estadounidenses que voten por la demócrata para “cambiar el destino del país”.
La artista, en un apasionado discurso, presentó a Harris como una líder comprometida con la libertad, describiéndola como una figura central para el futuro de la nación.
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“Las generaciones de nuestros antepasados están susurrando una profecía (...) es hora de que EU cante una nueva canción, una canción de unidad, dignidad y oportunidad”, proclamó Beyoncé en una intervención llena de simbolismo y esperanza.
Antes de un emotivo abrazo con la vicepresidenta, la cantante hizo una conexión entre la candidatura de Harris y la lucha histórica de las mujeres por sus derechos en el país.
El evento reunió a más de 20,000 personas en un estadio que se iluminó con pulseras electrónicas en los colores de la bandera de EU, dando un ambiente patriótico y lleno de energía. Asistieron familias, jóvenes y jubilados, reflejando la diversidad de la audiencia y honrando la cultura afroamericana, profundamente arraigada en Houston.
La noche, además, estuvo marcada por la defensa de los derechos reproductivos, un tema prioritario en la agenda de Harris, quien prometió restaurar el acceso al aborto a nivel nacional si llega a la presidencia.
Furioso contra voto anticipado
Mientras tanto, el expresidente Donald Trump, quien lidera las encuestas entre los candidatos republicanos, no tardó en responder al acto de Houston.
En un mitin en Míchigan, Trump criticó duramente a Beyoncé y cuestionó la organización del evento, alegando que la cantante “solo habló un par de minutos y luego se fue”, insinuando que el público esperaba un concierto.
Trump, quien promovió un mitin paralelo en Míchigan para alentar a sus seguidores a votar por adelantado, se desvió del guion para despotricar sobre este sistema de votación, calificándolo de “ridículo” y menos seguro que el voto en un solo día.
En su discurso, el expresidente aseguró que de ganar la elección, buscaría eliminar el voto anticipado, insistiendo en que solo el voto en papel es seguro. Esta posición contrasta con el esfuerzo del propio Partido Republicano por incentivar el voto anticipado como una estrategia para aumentar la participación.
Además de sus ataques a Beyoncé, Trump dirigió su ira hacia la prensa y contra la ciudad de Detroit, a la que se refirió como un ejemplo de decadencia.
“Detroit nos convierte en una nación en vías de desarrollo”, dijo, refiriéndose a la desindustrialización que sufrió la ciudad tras el cierre de fábricas automotrices en las últimas dos décadas.