La hija del expresidente republicano George W. Bush (2001-2009), Barbara Pierce Bush, pidió este martes el voto para la candidata demócrata, la vicepresidenta Kamala Harris, y pasó los últimos días haciendo campaña en el disputado estado de Pensilvania.
La revista People publicó este martes una entrevista con la también nieta del expresidente George H.W. Bush, en la que afirma tener la esperanza de que los demócratas hagan avanzar Estados Unidos y “protejan los derechos de las mujeres”.
“Fue inspirador reunirme con amigos y conocer a votantes con la campaña Harris-Walz en Pensilvania este fin de semana”, apuntó Pierce Bush, de 42 años.
Liz Cheney, agradecida
Su decisión fue celebrada por la exlegisladora Liz Cheney, hija del exvicepresidente (durante el mandato de Bush) Dick Cheney, y una de las voces más críticas del expresidente Donald Trump desde la derecha.
“Gracias, Barbara Bush, por defender la verdad, la decencia y la libertad”, apuntó a través de un mensaje en la red social X.
Cheney pidió el voto para Harris y el propio exvicepresidente también.
El silencio de su padre
Por su parte, George W. Bush, de 78 años, y la exprimera dama Laura Bush no han participado por el momento en la campaña y no han opinado sobre las elecciones presidenciales de 2024.
Harris también obtuvo el respaldo de Susan Ford Bales, la hija de otro expresidente republicano, el fallecido Gerald Ford, quien asumió el cargo después de que Richard Nixon renunciara tras el escándalo del Watergate en 1974.
“Estados Unidos no puede retroceder a un paradigma divisivo de odio mutuo y desdén por nuestra Constitución”, apuntó Bales el 21 de octubre.