El presidente estadounidense, Joe Biden, que deja el poder dentro de poco más de un mes, anunció este domingo por sorpresa que firmó un indulto a favor de su hijo Hunter Biden, que en junio fue hallado culpable de tres delitos relacionados con posesión ilícita de armas, consumo de drogas e impago de impuestos, por considerar que sus problemas judiciales fueron instigados por sus rivales políticos.
“Hoy firmé un indulto para mi hijo Hunter”, dijo en un comunicado. Es un “indulto total e incondicional”, según una copia de la concesión ejecutiva de clemencia, que no podrá ser rescindida por el presidente electo Donald Trump, quien jura de nuevo el 20 de enero para un segundo mandato hasta 2029.
Al indultar a su hijo, Biden incumple su promesa pública que hizo repetidamente antes y después de abandonar la campaña para las elecciones del pasado noviembre. Incluso después de que Trump ganó las elecciones del pasado 5 de noviembre, el mandatario demócrata y su principal portavoz de la Casa Blanca reiteraron inequívocamente que no indultaría a Hunter Biden ni conmutaría su sentencia.
“Enjuiciado injustamente”
“Ninguna persona razonable que mire a los hechos en los casos de Hunter puede llegar a otra conclusión de que Hunter fue puesto en la mira solo porque es mi hijo”, indicó Biden en un comunicado, en el que asegura que sus rivales intentaron “romper” a su hijo, que fue “enjuiciado de manera selectiva e injusta”.
El indulto significa que Hunter Biden no será sentenciado por sus crímenes y elimina cualquier posibilidad de que lo envíen a prisión, lo cual era una posibilidad. Una vez que los jueces que supervisan sus casos sean notificados del indulto, probablemente cancelarán las audiencias de sentencia, que estaban programadas para el 12 de diciembre en el caso de las armas y el 16 de diciembre en el caso de los impuestos.
Biden dijo que sus oponentes políticos en el Congreso “instigaron” los cargos “para atacarme y oponerse a mi elección”.
Hunter Biden fue condenado por un jurado en junio por comprar y poseer ilegalmente un arma, después de un juicio que profundizó en su abuso de drogas y disfunción familiar. Luego se declaró culpable en septiembre de nueve delitos fiscales, derivados de 1.4 millones de dólares en impuestos que no pagó mientras gastaba generosamente en acompañantes, strippers, automóviles y drogas.