El Papa Francisco ha nombrado a Simona Brambilla, una religiosa con vasta experiencia en la vida misionera, como Prefecta del Dicasterio para la Vida Consagrada y las Sociedades de Vida Apostólica. Con este nombramiento, la hermana Brambilla se convierte en la primera mujer al frente de un ministerio en el Vaticano, un paso importante en la inclusión de las mujeres en puestos clave dentro de la Iglesia Católica.
Simona Brambilla, quien cumplirá 60 años el próximo 27 de marzo, tiene una trayectoria destacada dentro de la orden de las Misioneras Consolata, donde fue Superiora General desde 2011 hasta 2023. Además, desde octubre de 2023, había ocupado el cargo de Secretaria del Dicasterio para la Vida Consagrada y las Sociedades de Vida Apostólica, lo que le permitió conocer en profundidad los retos y necesidades de este ministerio. Con su nombramiento como Prefecta, se convierte en una figura clave en la orientación y reforma de la vida consagrada dentro de la Iglesia.
Este nombramiento forma parte de la política inclusiva que el Papa ha venido promoviendo desde el inicio de su pontificado, con un énfasis especial en el liderazgo femenino. En 2022, con la promulgación de la Constitución Apostólica Praedicate Evangelium, el Papa permitió que personas laicas, incluidas mujeres, pudieran ocupar cargos de Prefecto, un puesto tradicionalmente reservado para cardenales y arzobispos. Desde entonces, se ha logrado un notable incremento en la presencia de mujeres en la Curia Vaticana.
El aumento de mujeres en cargos importantes dentro del Vaticano ha sido una tendencia visible durante los años de papado de Francisco. Además de la hermana Brambilla, destacan otras mujeres que han sido nombradas para cargos de liderazgo, como Barbara Jatta, directora de los Museos Vaticanos, y Sister Raffaella Petrini, nombrada en 2022 Secretaria General del Gobernatorato. Este impulso por integrar más mujeres en el liderazgo eclesial resalta el compromiso del Papa por una Iglesia más inclusiva y representativa.
En este proceso de apertura, el Vaticano ha dado también espacio para otras mujeres en importantes cargos administrativos y eclesiásticos, como Emilce Cuda, Gabriella Gambino, Nataša Govekar y Cristiane Murray, quienes desempeñan roles clave en diversas áreas, desde la comunicación hasta la pastoral. Estas designaciones reflejan un cambio profundo en la estructura de poder de la Iglesia Católica, un cambio que busca reflejar la realidad de la sociedad contemporánea y brindar a las mujeres una mayor voz en las decisiones eclesiásticas.