
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, advirtió este domingo que los aranceles sobre los productos de Canadá y México previstos para el 2 de abril serán una realidad porque se los prometió a los fabricantes nacionales de automóviles, pese a la estrecha interdependencia de refacciones hechas en los dos países afectados por el chantaje del republicano.
En una entrevista que se emitió en “Sunday Morning Futures With Maria Bartiromo” de Fox News, Trump aseguró que el aplazamiento por un mes otorgado a México y Canadá era un “pequeño respiro”.
En febrero, Trump anunció aranceles del 25% a los países vecinos de Estados Unidos y socios del T-MEC. Esos aranceles se retrasaron un mes y se impusieron el martes, hasta que Trump decidió el miércoles pausar los aranceles a los fabricantes de automóviles por otro mes. Nuevamente, cambió de rumbo el jueves, pausando los aranceles a los productos mexicanos y canadienses cubiertos por el tratado de libre comercio hasta abril.
Respecto a la pausa en los aranceles al sector automotor, totalmente integrado entre los tres países, declaró que lo hizo porque quería “ayudar a los fabricantes estadounidenses” y les dio “un pequeño respiro”, pero sostuvo que los gravámenes “pueden subir” más adelante.
“Es una transición hacia abril y después de eso, no voy a hacer esto”, dijo Trump, en alusión a que no habrá nuevos retrasos en la aplicación de los aranceles, ya no habrá más dilación. “Les dije (a los fabricantes de automóviles): ‘Miren, esta vez lo voy a hacer’”, dijo Trump.
Golpe a la leche y la madera canadienses
Pero Trump ha seguido haciendo cambios a los planes arancelarios. El viernes, amenazó con nuevos aranceles a la madera y los productos lácteos canadienses.
Mientras tanto, el secretario de Comercio, Howard Lutnick, confirmó el domingo en “Meet the Press” de NBC los aranceles a los productos lácteos y madereros canadienses “comenzarán el 2 de abril”.
“No es una guerra comercial, es contra las drogas”
Lutnick indicó que los aranceles que entrarán en vigor el 2 de abril continuarán hasta que Trump se sienta “cómodo” con la forma en que ambos países están manejando el flujo de fentanilo, comentarios que parecieron repetirse el domingo en el programa “This Week” de ABC News, el director del Consejo Económico Nacional, Kevin Hassett. Hassett dijo que los movimientos arancelarios de ida y vuelta de Trump eran parte de “una guerra contra las drogas, no una guerra comercial”, destinada a frenar el flujo de fentanilo a los Estados Unidos.
“Lo que sucedió fue que lanzamos una guerra contra las drogas, no una guerra comercial, y fue parte de la negociación lograr que Canadá y México dejaran de enviar fentanilo a través de nuestras fronteras, y como los hemos visto progresar en la guerra contra las drogas, luego hemos relajado algunos de los aranceles que les pusimos porque están avanzando”, dijo Hassett.
Hassett afirmó que Canadá es una “fuente importante” de importaciones de fentanilo, a pesar de que Canadá es responsable de solo el 0,2% de las importaciones ilegales de la droga a los Estados Unidos.
Las tensiones comerciales y las señales de desaceleración del crecimiento han generado preocupaciones de que podría estar a punto de producirse una recesión. Cuando Bartiromo le preguntó si esperaba una recesión en 2025, Trump dijo: “Odio predecir cosas así. Hay un período de transición porque lo que estamos haciendo es muy grande”.