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El BLA, el Ejército de Liberación Baluchi, secuestró este martes un tren de pasajeros operado por la ferroviaria Jaffar Express, convoy en el que viajaban 450 personas.
Los hechos ocurrieron en la provincia de Baluchistán, una región fronteriza de Pakistán colindante con Irán y Afganistán.
De acuerdo con el propio BLA, sus efectivos bloquearon el paso del convoy cerca de la ciudad de Sibi, operación en la que resultaron muertos el maquinista del tren, un policía y un soldado.
Derivado de esta primera acción los rebeldes entraron en combate con los elementos del ejército pakistaní destacados en la zona, quienes fueron obligados a retirarse, según el comunicado del BLA.
Luego de esta primera escaramuza de ocho horas, 80 pasajeros lograron escapar.
Tras el secuestro, los insurgentes aseguraron tener bajo custodia a 214 personas que serían catalogadas por el BLA como prisioneros de guerra. Esto luego de que las fuerzas armadas pakistaníes recibieran un comunicado en el que los rebeldes solicitaron que el estado “ocupante” de Pakistán intercambie a presos políticos baluchis por los rehenes del convoy.
El comando insurgente que retuvo el tren, que transitaba desde Quetta a Peshawar, sentenció un ultimátum de 48h para que sus demandas fueran atendidas o “todos los prisioneros serán neutralizados y el tren completamente destruido”.
Pese al ultimátum, el gobierno pakistaní en Islamabad emprendió, este miércoles, una acción militar para rescatar a los rehenes y eliminar a los insurgentes.
De acuerdo con los informes, en un primer asalto por parte del ejército pakistaní, 155 rehenes fueron rescatados mientras los enfrentamientos continuaban en el terreno sumando, al menos, 27 atacantes ultimados.
Cables informativos sostenían que, al mediodía, aún había rehenes bajo amenaza del BLA, cuyos militantes podrían portar chalecos explosivos.
Se contabilizaron 17 personas heridas, entre rehenes e insurgentes, a medida que la operación de las fuerzas armadas de Pakistán se desarrollaba.
Cerca de las 15:00 de este miércoles, Pakistán informó que la operación culminó con 346 rehenes liberados y 33 terroristas abatidos.
Desafortunadamente, 27 rehenes perdieron la vida como resultado de la acción.
El Ejército de Liberación Baluchi es una guerrilla y movimiento político separatista que reivindica la autodeterminación del pueblo baluchi y la independencia de Baluchistán.
La organización está catalogada como movimiento terrorista por Pakistán, los Estados Unidos y el Reino Unido.