
La administración de Donald Trump sigue adelante con una brutal reestructuración del gobierno federal, orquestada por Elon Musk desde el Departamento de Eficiencia Gubernamental.
Con más de 100,000 despidos programados, los recortes afectan directamente a áreas clave como salud, educación, seguridad social y clima, dejando en el aire la continuidad de servicios esenciales para millones de ciudadanos.
Este viernes, Trump y Musk avanzarán en una segunda ola de despidos masivos, luego de ordenar a todas las agencias presentar planes para reducir personal, cerrar oficinas y cancelar contratos.
La medida, justificada como parte de la lucha contra la “burocracia estatal”, amenaza con desmantelar por completo el funcionamiento de varias dependencias esenciales.
Estos son los sectores más afectados:
El mayor recorte ocurre en la agencia encargada de atender a excombatientes, que verá una reducción de más de 80,000 empleados. La medida deja a miles de veteranos sin acceso a tratamientos médicos, asistencia psicológica y otros servicios cruciales.
El Departamento de Educación anunció la eliminación de casi la mitad de sus empleados. Con 2,000 despidos, el acceso a becas, programas de educación especial y financiamiento para escuelas públicas se verá severamente afectado.
La Administración del Seguro Social, encargada de gestionar beneficios para millones de jubilados y personas con discapacidad, perderá 7,000 trabajadores. Esto significa demoras en los pagos, colapsos en la atención y menos acceso a servicios críticos.
Por su parte, la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA), responsable de monitorear desastres naturales y emitir pronósticos meteorológicos, sufrirá una reducción de 1,000 trabajadores. Con estos recortes, el país perderá capacidad de respuesta ante huracanes, incendios y otros fenómenos climáticos extremos.
La administración de Trump redujo alrededor del 90% en los contratos de la Agencia de los EU para el Desarrollo Internacional (USAID), lo que se tradujo en la eliminación de más de 9,700 puestos de trabajo. La medida dejo a la agencia con aproximadamente 300 empleados de los más de 10,000 que tenía anteriormente.
Jueces bloquean despidos
La oleada de despidos masivos ha provocado una respuesta inmediata en los tribunales. Dos jueces federales ordenaron la reincorporación de miles de empleados despedidos en las últimas semanas.
El juez William Alsup, en San Francisco, dictaminó que miles de trabajadores en Defensa, Asuntos de Veteranos, Agricultura, Energía, Interior y Tesoro deben ser reinstalados, argumentando que el proceso violó sus derechos laborales.
Horas después, el juez James Bredar, en Maryland, bloqueó el despido masivo de empleados en 18 agencias, en respuesta a una demanda presentada por 20 estados liderados por demócratas.
Desmantelar el gobierno
Desde que Trump firmó su orden ejecutiva el 11 de febrero exigiendo “reducciones masivas de personal”, Musk ha sido el encargado de diseñar un plan de despidos sin precedentes en la historia del país.
El choque con el Poder Judicial es solo el primer obstáculo en una estrategia que apunta a reducir drásticamente el tamaño del gobierno, sin importar el impacto en los ciudadanos. Mientras Trump insiste en que eliminar empleos gubernamentales beneficiará a la economía, los mercados financieros ya comenzaron a temblar ante la posibilidad de una recesión derivada de estos recortes extremos.
Con tribunales en su contra, agencias al borde del colapso y millones de estadounidenses en riesgo, la pregunta es hasta dónde llegará la purga de Trump y Musk antes de que el sistema termine por romperse.