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El papa Francisco será dado de alta este domingo tras pasar 37 días ingresado en el Policlínico Gemelli de Roma, donde fue tratado por una infección respiratoria severa que derivó en una bronquitis con infección polimicrobiológica y neumonía bilateral, informó este sábado el doctor Sergio Alfieri, jefe del equipo médico que lo atiende.
“Será dado de alta mañana. Se encuentra en estado estable desde hace quince días. El periodo de reposo en la Casa Santa Marta continuará y permanecerá en convalecencia por un periodo de al menos dos meses”, detalló Alfieri en rueda de prensa.
Saludo desde el hospital
El Vaticano anunció que el pontífice planea “hacer una breve aparición este domingo al mediodía”, desde la ventana de su habitación en el hospital, para ofrecer un saludo y una bendición a los fieles, en lo que será su “primera manifestación pública en cinco semanas”.
Francisco no ha podido dirigir la tradicional oración dominical desde la Plaza de San Pedro desde el pasado 9 de febrero. Según la Santa Sede, “no recitará la oración del Ángelus completa este domingo”, pero sí saldrá al balcón para dar una señal visible de recuperación.
Hasta ahora, el único registro visual del papa durante su hospitalización fue una fotografía difundida por el Vaticano la semana pasada, en la que aparece rezando en la capilla del centro médico.
Convalecencia prolongada
Tras recibir el alta, Francisco regresará a su residencia en la Casa Santa Marta, dentro del Vaticano, donde continuará con su proceso de recuperación bajo vigilancia médica.
Aunque su estado general ha mejorado notablemente, los especialistas subrayan que el pontífice “necesita un reposo prolongado”, dada la gravedad del cuadro respiratorio que sufrió y su historial pulmonar, ya que en su juventud le fue extirpada parte de un pulmón.
El papa, de 88 años, ha enfrentado varios episodios de salud en los últimos años, pero esta ha sido una de las internaciones más largas de su pontificado.
Su entorno asegura que, aunque sigue débil, mantiene plena lucidez y ha seguido algunas tareas ligeras desde su habitación, aunque con horarios reducidos y bajo estricta supervisión.