
El traslado de inmigrantes venezolanos a El Salvador, acusados sin juicio y exhibidos en público como peligrosos criminales, sigue levantando polvareda. Este lunes, una de los tres jueces de la Corte de Apelaciones que revisa el bloqueo de la Ley de Enemigos Extranjeros (LEE) de Estados Unidos, impuesto por un juez federal, consideró que el país trató mejor a los nazis expulsados durante la II Guerra Mundial que a los casi 200 venezolanos deportados recientemente a El Salvador con base en dicha norma.
“Los nazis obtuvieron mejor trato bajo la LEE (Ley de Enemigos Extranjeros)”, aseveró Karen Henderson, una de los tres magistrados que integran el panel que debe pronunciarse sobre la apelación presentada por el Gobierno estadounidense contra el bloqueo temporal de la mencionada norma por parte de un juez federal, James Boasberg.
“Cuestionamos la analogía nazi”, replicó sorprendido el vicefiscal general Drew Ensign, quien argumentó durante la vista oral de hoy que la orden de Boasberg supone “una intrusión enorme y sin precedentes” en las políticas de inmigración y seguridad nacional del presidente, Donald Trump.
De hecho, la orden del juez Boasberg llevó a Trump a exigir la expulsión del “izquierdista radical”, lo que a su vez llevó al presidente de la Corte Suprema de EU, John Roberts, a pedir al mandatario republicano que respete la separación de poderes, necesaria para el buen funcionamiento de cualquier democracia.
Ante la polémica (incluidas las amenazas del régimen venezolano de denunciar a EU por crímenes de lesa humanidad), el gobierno estadounidense asegura, sin pruebas, que la “mayoría” de los inmigrantes venezolanos encerrados en el Centro de Confinamiento del Terrrorismo (Cecot), la macrocárcel que mandó construir el presidente salvadoreño Nayib Bukele, son miembros del cártel venezolano Tren de Aragua
Trump invocó el pasado 15 de enero la Ley de Enemigos Extranjeros, de 1798, para expulsar a extranjeros sin una vista judicial previa, con el objetivo de aplicarla contra los presuntos miembros del Tren de Aragua, asegurando que “está invadiendo el país”.
Desde ese mismo 15 de marzo, Boasberg mantiene bloqueada la aplicación de dicha ley, lo que ha llevado al Gobierno a apelarla.
A falta de que los tres jueces del tribunal se pronuncien sobre el recurso en los próximos días, Henderson consideró este lunes que el Gobierno no dio oportunidad a los venezolanos deportados de probar siquiera que no son miembros de TdA y los “metió a toda prisa en aviones destinados a El Salvador”. En ese sentido, indicó que la orden de bloqueo temporal de Boasberg parece tener sentido
“Si el Gobierno defiende esto, este sábado puede meterme a mí en un avión y expulsarme diciendo que soy del TdA”, añadió.
Por su parte, uno de los letrados que presentó la demanda colectiva contra la implementación de la ley de Enemigos Extranjeros ante la corte federal, Lee Gelert, aseguró ante el tribunal de apelación que el Gobierno está usando “un atajo” para lograr deportaciones sumarias de inmigrantes.
También indicó que lograrán demostrar eventualmente que todos “o al menos la mayoría” de los venezolanos enviados a El Salvador no son miembros de TdA y que este grupo criminal no tiene en realidad “una estructura jerárquica” y no ha activado una invasión de EU como defiende el Gobierno.