El presidente de Argentina, Javier Milei, ha logrado mediante insultos al presidente del gobierno de España, Pedro Sánchez, llevar las históricas relaciones entre España y Argentina a un punto muerto, al borde de la ruptura de relaciones diplomáticas, un hecho que causa estupor entre la oposición argentina.
Este martes, la cancillería española convirtió la llamada a consultas de su embajadora en Argentina, tras llamar Milei desde Madrid “corrupta” a Begoña Gómez, esposa del mandatario socialista, en una retirada definitiva. Eso significa que la actual embajadora, María Jesús Alonso Jiménez, no volverá a su puesto al frente de la legación diplomática española en Buenos Aires.
Esta ha sido la respuesta del Gobierno español tras conocer las últimas declaraciones que el presidente ultraderechista argentino, Javier Milei, realizó al canal de televisión Todo Noticias (TN) nada más regresar a su país el lunes, en las que lanzó una nueva catarata de insultos contra Pedro Sánchez y su Gobierno.
“Es tan cobarde [Sánchez] que necesitó mandarme a pegar por mujeres. Es algo de una cobardía feroz”, dijo Milei, en alusión a las críticas que ha recibido por parte de varias ministras españolas.
"Alineado con el Kirchnerismo"
Además, acusó al jefe del Gobierno español de estar “alineado con el kirchnerismo”, la oposición peronista en Argentina, y de tener como asesor al expresidente Alberto Fernández, que reside en España.
Tras conocer la decisión española de retirar a la embajadora, Milei respondió con nuevos insultos: “Es un disparate propio de un socialista arrogante”, declaró.
“[Sánchez] Es tan fatalmente arrogante que sobre un problema personal, en una frase que no tenía nombres, se sintió aludido. Entonces el problema es del señor Pedro Sánchez, y a partir de ahí hace una escalada diplomática absolutamente sin sentido”, prosiguió el presidente argentino. “¿Acaso él se cree que es el Estado? Eso es bien totalitario, es bien de socialista”, agregó.
Las palabras insultantes de Milei el pasado domingo en un mitin organizado por Vox en Madrid, que según él no iban dirigidas a nadie, fueron estas: “No saben qué tipo de sociedad y país puede producir el socialismo y qué calaña de gente atornillada en el poder y qué niveles de abuso puede llegar a generar. Aun cuando tenga la mujer corrupta, digamos, se ensucia y se tome cinco días para pensarlo”.
Aludía así, aunque sin dar nombres, al periodo de reflexión que se tomó Pedro Sánchez a finales de abril para decidir si continuaba en el cargo después de que un juez afín abriera diligencias por la denuncia contra su esposa, Begoña Gómez, lanzada por una organización neofranquista, basada en bulos de medios ultraconservadores.
Milei sostiene, sin embargo, que él es “el agredido” porque el Gobierno español lleva meses insultándole, en referencia al ministro español de Transporte, Óscar Puente, quien llegó a sugerir que Milei se drogaba, un episodio que ambos países habían dado por saldado.
La medida anunciada este martes por Albares es la tercera que adopta la diplomacia española respecto al Gobierno argentino en solo 48 horas: primero fue la llamada a consultas de la embajadora española en Buenos Aires; luego, la convocatoria del embajador argentino en Madrid; y finalmente, la retirada definitiva de la máxima responsable de la legación diplomática española.
Segundo país inversor
España es el segundo inversor extranjero en Argentina y la colonia española en dicho país es la más numerosa del mundo (482,176 ciudadanos).
La retirada definitiva de una embajadora tiene escasos precedentes. España retiró en 2016 a su embajador en Caracas después de que el presidente venezolano, Nicolás Maduro, cargase contra el entonces jefe del Gobierno español, Mariano Rajoy, a quien llamó “racista, basura corrupta y basura colonialista”.
En 2020, junto con otros países europeos, España rebajó a la categoría de encargado de Negocios a su representante en Venezuela, una situación que mantuvo hasta diciembre de 2022.
Tras la decisión del Consejo de Ministros, Albares ha insistido en que España quiere mantener las mejores relaciones con Argentina, pero ha subrayado la gravedad de la conducta de Milei: un jefe de Estado extranjero que acude a la capital de otro país para “insultar a sus instituciones” y protagonizar una “injerencia flagrante en sus asuntos internos”, vulnerando “principios básicos de las relaciones internacionales”. Se trata, ha enfatizado, “de un caso único del que no existen precedentes”.
Copyright © 2024 La Crónica de Hoy .