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Estallan de nuevo protestas sociales en Israel por democracia en peligro

Decenas de miles de personas realizaron diversas protestas en contra de la reforma judicial que impulsa el gobierno ultraderechista de Benjamin Netanyahu.

Oriente Medio

Protesta masiva de ciudadanos en Tel Aviv en contra de la reforma judicial.

Protesta masiva de ciudadanos en Tel Aviv en contra de la reforma judicial.

La intensa jornada de movilizaciones contra la reforma judicial del gobierno de Benjamin Netanyahu culminó este martes con multitudinarias protestas en las ciudades de Israel, entre ellas Tel Aviv, Jerusalén, Haifa o Beer Sheva, en otra demostración ciudadana de fuerza contra el polémico plan. Los ciudadanos instan al Consulado de Estados Unidos"a seguir apoyando" a los movimientos "que luchan incansablemente por la democracia israelí", en medio de un día de protestas en que multitudes de israelíes se vuelven a movilizar por todo el país.

La movilización más masiva fue en Tel Aviv, centro principal de las protestas y donde decenas de miles de personas salieron a la calle de nuevo tras una larga jornada por todo Israel, que incluyó una gran protesta ante el principal aeropuerto del país, marchas de norte a sur y acciones de desobediencia civil como cortes de carreteras.

A su vez, varios miles de personas recorrieron Jerusalén, donde está previsto que la marcha acabe frente a la residencia oficial del primer ministro, y se movilizaron en un número parecido en otras ciudades de dimensión más pequeña como Haifa o Beer Sheva.

Señora israelí manifestándose en la calle contra la reforma judicial.

Señora israelí manifestándose en la calle contra la reforma judicial.

“Día de Resistencia”: una jornada por la democracia

La jornada, denominada "Día de Resistencia", arrancó hoy a primera hora después de que el Parlamento israelí aprobara esta madrugada en primera lectura un proyecto de ley que elimina la doctrina de razonabilidad, que permite a la Corte Suprema revisar y revocar decisiones gubernamentales en base a si éstas son razonables o no, uno de los pilares de la reforma judicial. También integró a los principales movimientos de protesta que desde hace seis meses han liderado la lucha contra la reforma judicial, entre ellos soldados reservistas, académicos, empleados en empresas de tecnología punta o entidades civiles. Todos ellos creen que la reforma que ahora busca impulsar el actual Gobierno -el más derechista de la historia del país- sería un golpe de gracia a las bases democráticas de Israel.

Según los detractores, el plan acabaría con la separación de poderes, socavaría la independencia de la Justicia, quitaría atribuciones al Tribunal Supremo y daría poder casi ilimitado al Ejecutivo, lo que llevaría a Israel hacia ciertos niveles de autocracia y "dictadura". Ante ello, las movilizaciones se vienen repitiendo semanalmente desde hace más de medio año, han sido las más masivas en Israel en décadas y el pasado marzo incluso consiguieron que Netanyahu frenara temporalmente la tramitación de la reforma para sentarse a negociar con la oposición, en un diálogo mediado por el presidente israelí.

Tensiones en el Parlamento para la aprobación

Sin embargo, las conversaciones no desembocaron en acuerdos y el Gobierno volvió a poner en marcha el plan, validado esta madrugada en el Parlamento en primera instancia. Faltan dos votaciones más para la aprobación final de un proyecto de ley clave para la reforma, que eliminaría la doctrina de razonabilidad. Esto permite hasta ahora al Supremo revisar y revocar decisiones gubernamentales si éstas son razonables o no, un poder que perdería en caso de aprobarse la legislación propuesta.

El Parlamento israelí aprueba en primera lectura una ley que impide al Supremo revisar decisiones del Gobierno.

El Parlamento israelí aprueba en primera lectura una ley que impide al Supremo revisar decisiones del Gobierno.

Europa Press

En los últimos meses, ministros ultraderechistas que integran la coalición gubernamental israelí como Itamar Ben Gvir, titular de Seguridad Nacional, han instado a las fuerzas policiales a aplicar más mano dura contra los manifestantes, algo que ha agravado aún más las tensiones entre la población israelí, ya de por sí polarizada. Durante la jornada de hoy, los detenidos en las varias protestas por la Policía por "violar el orden público" ascienden a más de 70, aunque 45 de ellos ya fueron liberados.