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La ministra de Seguridad argentina visita la megacárcel de Bukele en El Salvador

Patricia Bullrich quiere copiar el modelo del “país más seguro de América Latina”, como dice su par salvadoreño

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La ministra de Seguridad argentina, Patricia Bullrich, inspeccionas la macrocárcel de El Salvador, ante la mirada de los pandilleros presos

La ministra de Seguridad argentina, Patricia Bullrich, inspecciona la macrocárcel de El Salvador, ante la mirada de los pandilleros presos

EFE

La ministra de Seguridad argentina, Patricia Bullrich, visitó este domingo el Centro de Confinamiento del Terrorismo (Cecot) en El Salvador, la macrocárcel que mandó construir el presidente Nayib Bukele y que alberga ya a 14,000 pandilleros.

"Como fruto de la reunión bilateral entre el presidente Nayib Bukele y el presidente Javier Milei, le damos la bienvenida a la ministra Patricia Bullrich, al país más seguro de América Latina", publicó en X el ministro de Seguridad salvadoreño, Gustavo Villatoro.

Aprendiendo del "modelo Bukele"

Agregó: "Es un verdadero placer recibirla en El Salvador, estoy seguro de que esta visita desde Argentina será enriquecedora, usted y su equipo van a poder conocer de primera mano el 'Modelo Bukele'".

El titular de la cartera de Seguridad publicó también una serie de fotografías en las que se observa el recorrido que realizó con Bullrich en la referida cárcel.

El Cecot, construido en una zona remota del distrito de Tecoluca, a unos 75 kilómetros al sudeste de San Salvador, tiene capacidad para 40,000 presos y actualmente alberga a unos 14,000 detenidos tras un traslado de 2,000 pandilleros a inicios de semana.

Bullrich que quiere copiar dicho modelo de “tolerancia cero” con el crimen organizado, realizó también una visita a la Academia Nacional de Seguridad Pública, para reunirse con su director, César Flores Murillo. quien le compartió “una explicación muy completa y detallada sobre la administración de la Policía y sus importantes resultados".

El Salvador, bajo régimen de excepción

El Salvador se encuentra desde marzo de 2022 bajo un régimen de excepción, ampliado en 26 ocasiones en el Congreso de mayoría oficialista, tras una escalada de homicidios atribuida a las pandillas.

De acuerdo con los datos oficiales, en este contexto suman más de 80,000 las detenciones, de las que más de 7,000 personas habrían salido en libertad condicional.

El Gobierno atribuye a este régimen de excepción gran parte de la disminución de la violencia, que pasó de 103 homicidios por cada 100,000 habitantes, una de las tasa más altas del mundo, a 2.4 casos por cada 100,000 habitantes en 2023, la tasa más baja de América Latina, con una caída del 93% desde que Bukele asumió la presidencia del país centroamericano, en 2019.

Las organizaciones humanitarias han recibido más de 6,000 denuncias de atropellos a derechos humanos en este contexto, principalmente por detenciones arbitrarias, torturas y desapariciones de corta duración, además de denunciar la muerte de más de 300 detenidos, la mayoría con señales de violencia.