Sánchez recibe a González, entre la amenaza de Caracas de cortar relaciones con Madrid
El presidente socialista español no cede a la presión del Congreso, que le pide que lo reconozca como presidente venezolano
crisis en venezuela
El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, y el candidato opositor antichavista, Edmundo González Urrutia, este jueves en el Palacio de la Moncloa de Madrid
El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, recibió este jueves en el Palacio de la Moncloa al candidato opositor antichavista, Edmundo González Urrutia, un gesto que podría agravar un poco más la crisis entre los dos países y concretarse la amenaza del régimen de Nicolás Maduro de cortar relaciones diplomáticas y comerciales con el país europeo.
El encuentro sirvió básicamente para una foto de ambos políticos, acompañado del reconocimiento del mandatario socialista español de que seguirá trabajando “en favor de la democracia, el diálogo y los derechos fundamentales” del pueblo venezolano, pero no se concretó en el anuncio de que el gobierno español reconocía a González como presidente de Venezuela, tal como se lo pidió el Congreso, con los votos de la derecha y los socios nacionalistas vascos de Sánchez.
El reconocimiento del legislativo español a González como presidente legítimo de Venezuela —el primero de un parlamento europeo— provocó que la Asamblea Nacional venezolana (controlada por el régimen chavista) pidiese al presidente Nicolás Maduro que rompiese relaciones diplomáticas y comerciales con España.
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“Grata conversación”
Tras el encuentro, ni Sánchez ni González hicieron declaraciones, aunque, el político venezolano (exiliado en España desde el domingo, para evitar ser encarcelado) escribió un escueto mensaje en el que se refirió a la “muy grata e interesante conversación” con el presidente español, a quien expresó su “reconocimiento por su interés de trabajar por la recuperación de la democracia y el respeto a los derechos humanos” en Venezuela.
El dirigente opositor venezolano, que llegó el domingo a España para pedir asilo político, insistió en que, pese a su salida de Caracas, su "compromiso" con el mandato que ha recibido de parte del pueblo soberano de Venezuela "es irrenunciable", aunque no detalló si pensaba volver a Venezuela para tratar de ser investido presidente en enero, que es lo que piensa hacer Maduro para un tercer mandato consecutivo, tras ser declarado ganador de las elecciones de julio por su Tribunal Supremo.
Reunión europea y sanciones de EU
El Ejecutivo español no se plantea reconocer la victoria de la oposición y se remite a la postura común que mantienen los socios de la Unión Europea, que siguen reclamando las actas electorales y que analizarán la situación en Venezuela en un pleno del Parlamento la próxima semana.
La Embajada de España en Venezuela está trabajando con “absoluta normalidad” y el interés del Ejecutivo español es “mantener las mejores relaciones con el pueblo venezolano”, apuntó la ministra portavoz del Gobierno, Pilar Alegría.
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Mientras tanto, Estados Unidos sancionó este jueves a 16 funcionarios venezolanos, incluidos miembros del Consejo Nacional Electoral (CNE), el Tribunal Supremo de Justicia y la Asamblea Nacional, por proclamar “falsamente” la victoria de Maduro en las elecciones del 28 de julio.
Paralelamente, un grupo de 49 países más la Unión Europea firmaron una declaración conjunta en Naciones Unidas para pedir “restablecer las normas democráticas en Venezuela”
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