Tribunal condena a Bolsonaro; pierde sus derechos políticos por ocho años
El exmandatario brasileño fue declarado culpable de abusos de poder; alega que la inhabilitación política es una "puñalada en la espalda"
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Bolsonaro no podrá presentarse a cargos electivos ni ocupar puestos en la administración pública por ocho años
En una decisión tomada por cinco votos contra dos, el Tribunal Superior Electoral (TSE) de Brasil ha despojado al ex presidente Jair Bolsonaro de sus derechos políticos. Esta condena se basa en los "abusos de poder" cometidos durante la campaña electoral que llevó al actual presidente Luiz Inácio Lula da Silva al poder el año pasado.
Bolsonaro, líder de la ultraderecha en Brasil, de 68 años, no podrá presentarse a cargos electivos ni ocupar puestos en la administración pública durante los próximos ocho años, a partir de octubre de 2022, cuando se celebraron las elecciones que Lula ganó.
El juez Alexandre de Moraes, presidente del TSE, emitió el último voto en este caso. Moraes, quien fue objeto de virulentos ataques por parte del bolsonarismo durante la campaña electoral, afirmó que esta sentencia es una respuesta al "populismo degradante nacido en discursos de odio y antidemocráticos". Destacó que estos discursos propagan una desinformación asquerosa no sólo en Brasil, sino en todo el mundo, con el único objetivo de engañar a los electores.
Reunión en 2022, el fundamento de la condena
La mayoría de los jueces del TSE respaldaron la posición del relator del proceso, Benedito Gonçalves, quien consideró a Bolsonaro culpable de abusos de poder durante la campaña electoral. El foco de la acusación se centró en una reunión convocada por Bolsonaro el 18 de julio de 2022, en la que se descalificó la transparencia del sistema electoral y la democracia.
Según la sentencia, este hecho constituyó un "abuso de poder político, conductas vedadas y desorden informativo", así como un "uso indebido de predios públicos y medios de comunicación", al ordenar la transmisión del evento por la televisión pública.
Los jueces argumentaron que la reunión mencionada formaba parte de una "sistemática campaña de desinformación" llevada a cabo por Bolsonaro contra la Justicia electoral y las instituciones democráticas de Brasil. De Moraes enfatizó que estas acciones no se trataban de opiniones personales, sino de "mentiras permanentes y fraudulentas" con el objetivo de subvertir y pervertir el proceso electoral y, por ende, la democracia. También se mencionó la difusión de discursos de odio y antidemocráticos en las redes sociales, con un falso barniz de veracidad.
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Segunda “puñalada”
Por su parte, el expresidente afirmó que la decisión fue una "puñalada en la espalda": "Recientemente recibí una puñalada en la barriga y ahora me dieron una puñalada en la espalda con la inhabilitación política por abuso de poder político", afirmó el líder de la ultraderecha en Brasil en una inmediata reacción a la decisión de la máxima autoridad electoral y al recordar el atentado que sufrió en 2018.
Esta condena se suma a las diversas causas legales en las que Bolsonaro aún está involucrado. Algunos jueces incluso sugieren que el discurso del ex presidente podría haber incitado el asalto a las sedes de los tres poderes el 8 de enero, en un intento fallido de llevar a las Fuerzas Armadas a derrocar a Lula. Actualmente, Bolsonaro enfrenta una decena de casos legales, uno de los cuales lo considera sospechoso de haber alentado esta intentona golpista.
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