En octubre de 2024, el primer mes de la presidencia de Claudia Sheinbaum, México registró un total de 2 mil 293 homicidios dolosos, con un promedio diario de 73.9 asesinatos, según datos preliminares del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SNSP). Aunque esta cifra representa una reducción del 2.4% en comparación con septiembre, cuando se contabilizaron 2,350 homicidios, también supone un incremento del 7% respecto a agosto y un aumento del 6.7% frente a octubre de 2023, lo que indica un preocupante panorama de violencia en el inicio de esta nueva administración.
Los estados más afectados por los homicidios en octubre incluyen Guanajuato, Sinaloa y el Estado de México, que concentran una gran parte de los incidentes. Estos estados, tradicionalmente violentos debido a la actividad del crimen organizado, han experimentado un aumento en los enfrentamientos entre cárteles rivales y con las fuerzas de seguridad. En particular, Sinaloa ha sido escenario de intensos conflictos tras la captura de líderes del Cártel de Sinaloa, lo que ha generado una escalada de violencia en la región.
A nivel nacional, los estados con las tasas de homicidio más altas por cada 100 mil habitantes fueron Colima, con 82.77; Morelos, con 57.73; y Baja California, con 45.36. Estas tasas reflejan la concentración de la violencia en determinadas zonas y el desafío para las autoridades de implementar medidas que reduzcan estos índices en territorios que, durante años, han sido vulnerables a la influencia del crimen organizado y los conflictos entre grupos criminales.
La administración de Sheinbaum ha respondido con un aumento en los operativos militares, logrando en octubre la detención de 824 personas por delitos de alto impacto. En esta Sedena, la Semar y la Guardia Nacional, las cuales han intensificado su presencia en las zonas más afectadas por la violencia. Durante el mes, las Fuerzas Armadas también aseguraron un total de 820 armas de fuego y más de 33 toneladas de drogas, incluyendo un decomiso histórico de 8 mil kilogramos de cocaína en altamar.
Pese a estos esfuerzos, el aumento de homicidios en comparación con el mismo mes del año anterior evidencia los desafíos que enfrenta el gobierno de Sheinbaum para frenar la ola de violencia. El inicio de esta administración ha estado marcado por eventos de alto impacto, como el asesinato de dos periodistas en Michoacán y Colima, y la muerte de varios civiles en enfrentamientos con fuerzas de seguridad en Tamaulipas y Chiapas. Estos incidentes han puesto en tela de juicio la efectividad de la estrategia de seguridad actual y resaltan la necesidad de fortalecer las políticas de prevención y respuesta ante el crimen.
Con un enfoque que busca la paz y la justicia, la presidenta ha señalado su compromiso de enfrentar el crimen y reforzar la seguridad en el territorio nacional, aunque los primeros resultados reflejan la magnitud de este reto.