“El 2024 será recordado por siempre en nuestra historia nacional que traspasa fronteras, como el año en el que una gran mujer llegó a la Presidencia del país, en este año llegamos todas”, aseveró la gobernadora de Quintana Roo, Mara Lezama.
En un enfático mensaje, en el que se refirió a que con la Cuarta Transformación las mujeres del país “hoy extienden sus alas”, la mandataria estatal aseveró que atrás quedaron los años en los que muchas mujeres que permanecían bajo el yugo, bajo el maltrato, bajo la “cosificación”, en el dolor, en el abandono y en el olvido.
Ante la presidenta de la República, Claudia Sheinbaum Pardo, quien encabezó, en Chetumal, Quintana Roo, la ceremonia del Primer Aniversario del Tren Maya, y la cancelación del timbre postal conmemorativo, Lezama Espinosa advirtió que las mujeres nunca más vamos a permitir que la historia nos omita, ni a permitir que se les haga a un lado.
“Nunca más vamos a escuchar que no somos aptas para algún trabajo o responsabilidad”, al tiempo que se refirió a palabras que a miles de mujeres atemorizaron como: “si te vas te quitó a tus hijos, si te vas me mato, si te vas te mato. Nunca más la burla hacia ninguna de nuestras mujeres indígenas”, y demandó, precisamente, no regatear el trabajo de las mujeres artesanas, pretendiendo pagar menos por su esfuerzo.
En un mensaje lleno de orgullo hacia las mujeres, quienes hoy gozan de derechos Constitucionales, dijo, e incluso, ha quedado asentado en la Carta Magna del país el “presidenta con A”, la gobernadora quintanarroense reconoció el papel preponderante de la mujer con una presidenta mujer, y una gobernadora de Quintana Roo, también mujer “las primeras mujeres”, así como varias secretarias de estado que estuvieron presentes en el estrado de dicho evento.
Reconocimiento también a los hombres
“Contigo querida doctora nos nunca más nos van a volver a decir que no podemos, ¡claro que podemos!, sólo hace falta voltear a vernos aquí en este presidio tantas mujeres valiosas, ¡hombres también, eh!, no es un tema de sectarismo, porque hay que dejarlo claro: estamos muy contentas con los hombres también, pero ya nos tocaba a las mujeres”.
“Es tiempo de las mujeres y siempre debió serlo, ¿quién carambas nos va a decir que no podemos mujeres?, nadie, ¡que vivan las mujeres!”, palabras que generó un sonoro aplauso de las y los asistentes, así como de quienes permanecían en el estrado acompañando a la Presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo.
La gobernadora, quien orgullosamente portaba un vestido hecho, precisamente a mano por artesanas de la entidad, enfatizó de manera especial, el apoyo de los elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional, “sin ellos, hubiera sido imposible la culminación del Tren Maya”, también agradeció a las empresas que tuvieron momentos complicados a las y los trabajadores.
Enfatizó la inauguración de los tramos 6 y 7 del Tren Maya, con lo que se completa el circuito de 1,554 kilómetros “de esperanza, impulsado por la visión del entonces presidente López Obrador ahí donde todos sabemos que está”.
Tren que lleva desarrollo y justicia social
En su largo discurso, Mara Lezama destacó la importancia que cobra el recorrido del Tren Maya, -que cruza por cinco estados del sureste mexicano: Quintana Roo, Chiapas, Tabasco, Campeche y Yucatán, obra emblemática que inició en la pasada administración y se concluye en la de la Presidenta Sheinbaum Pardo, con lo cual, sostuvo, “en cada uno de los vagones y de los asientos, llega justicia social, crecimiento económico, más oportunidades, más empleo, más bienestar. Llega el desarrollo al que diremos siempre sí, pero con prosperidad compartida que lleva de la mano la responsabilidad compartida”.
El tren de pasajeros –que eventualmente se complementará con el transporte de carga-, enfatizó, marca un antes y un después convirtiéndose en el detonante de la economía.
La mandataria estatal subrayó que un aspecto central de esta transformación es continuar la lucha, para acabar de una vez por todas con la corrupción que tanto daño ha hecho y que nunca más vuelva la arrogancia y la prepotencia del poder.
“Seguiremos trabajando a ras de piso nunca más con los gobiernos que nos veían por encima del hombro, que nos lastimaron creando brechas de desigualdad, que ahora estamos cerrando”.