La noche del martes, un hombre encapuchado irrumpió en el Museo de Cera de Ciudad de México y destruyó la figura del primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu. El agresor roció pintura roja sobre la estatua, colocó una bandera de Palestina y, con un martillo, destrozó el rostro de la figura de cera.
“Con respeto al pueblo judío, cuya identidad ha sido secuestrada por estos genocidas, tengo que dar de baja a este criminal de guerra”, declaró el manifestante, según un video viralizado en redes sociales. Antes de huir, el hombre exclamó: “¡Viva Palestina, viva Yemen, viva Puerto Rico!”.
Condena de la Embajada israelí
La Embajada de Israel en México condenó este miércoles el acto de vandalismo. En un comunicado, calificó el ataque como “detestable” y afirmó que envía “un mensaje peligroso de violencia”.
“Existe una diferencia puntual entre activismo y vandalismo. Lo ocurrido ayer no constituye activismo legítimo en absoluto, sino un acto de pura violencia”, señaló la representación diplomática. También instó a las instituciones culturales a proteger sus exposiciones y evitar este tipo de actos.
JUST NOW: Activists in Mexico City destroy a wax statue of Israeli Prime Minister Benjamin Netanyahu with hammers pic.twitter.com/nIVljKUnS2
— BreakThrough News (@BTnewsroom) January 8, 2025
Protestas por Palestina en México
El incidente ocurre en un contexto de protestas en México, donde grupos pro-Palestina han exigido a la presidenta Claudia Sheinbaum una postura más contundente contra Israel. Sin embargo, tanto Sheinbaum como su predecesor, Andrés Manuel López Obrador, han mantenido una posición neutral, rechazando calificar el conflicto como “genocidio”.
El ataque en el Museo de Cera se suma a las tensiones generadas por el conflicto en Gaza, reflejando cómo las manifestaciones internacionales se extienden a actos simbólicos y controversiales.