El alcalde de Tijuana, Ismael Burgueño Ruiz, anunció este miércoles la declaratoria de emergencia en la ciudad ante la preocupación de que el presidente electo de EU, Donald Trump, cumpla sus promesas de deportaciones masivas tras asumir el cargo el próximo lunes.
La medida fue aprobada por unanimidad en el cabildo municipal, argumentando la necesidad de prepararse ante una posible contingencia migratoria.
Burgueño explicó que la decisión responde a las múltiples declaraciones de Trump, ampliamente difundidas en medios internacionales, sobre un probable arribo masivo de migrantes por esta frontera.
“Se trata de garantizar condiciones dignas, respeto a los derechos humanos y un buen retorno a quienes podrían llegar por Tijuana”, afirmó el alcalde, quien pertenece al partido Morena.
Coordinación interinstitucional
El alcalde destacó que la declaratoria de emergencia incluye facultades especiales para que el secretario de Gobierno, Arnulfo Guerrero León, y otras dependencias municipales gestionen recursos necesarios, como la contratación de servicios, adquisición de equipos, adecuación de obras y arrendamiento de bienes inmuebles para atender esta problemática.
Además, se busca establecer un “puente humanitario” mediante una coordinación interinstitucional que permita dar atención integral a los migrantes, en colaboración con los tres niveles de gobierno: municipal, estatal y federal.
En respuesta, la presidenta Claudia Sheinbaum señaló en su conferencia matutina que no comprende del todo por qué Tijuana declaró esta emergencia, pero aseguró que su gobierno está preparado para recibir a los mexicanos deportados “de la mejor manera posible”.
El temor por las deportaciones masivas radica en que cerca de la mitad de los 11 millones de indocumentados en EU son mexicanos, cuyas remesas representan un 4 % del PIB nacional, lo que subraya la relevancia económica y social de este fenómeno.
Un desafío para la frontera norte
Burgueño señaló que esta situación no solo impactará a Tijuana, sino a toda la frontera norte de México, destacando que la ciudad asume su responsabilidad social e histórica al aprobar estas medidas preventivas. “Solo con la participación de los tres órdenes de gobierno podremos salir adelante ante esta situación que podría concretarse”, concluyó.
Con esta declaratoria, Tijuana busca estar preparada para enfrentar un escenario que podría representar una presión inédita sobre sus recursos y servicios, mientras las deportaciones masivas de Trump continúan siendo una posibilidad latente (con información de EFE).