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“Que se oiga bien y que se oiga fuerte: las y los mexicanos allá sostienen la economía de Estados Unidos, en el campo, en los servicios, en todos lados. Estados Unidos no sería lo que es si no fuera por el pueblo trabajador (de México) que se va allá a ayudar”, subrayó la presidenta Claudia Sheinbaum en su segundo día de visita por Oaxaca, en relación con las deportaciones masivas ordenadas por su homólogo estadounidense Donald Trump.
Las declaraciones de la Jefa del Ejecutivo federal se registran con relación al decreto firmado por el presidenta Trump para deportar de manera masiva a personas que residen en el vecino país de manera irregular, y tras las medidas con las que se da luz verde para que personal de migración puedan entrar a iglesias y escuelas en busca de indocumentados y que fueron aprobadas por la nueva titular del Departamento de Seguridad Nacional (DHS, en inglés).
Sheinbaum reiteró que los migrantes mexicanos “van a recibir siempre nuestro apoyo, nuestra solidaridad” y destacó que si regresan al país serán recibidos con “los brazos abiertos” para darles el apoyo que se merecen “porque son generosos y solidarios”.
Tras las acciones emprendidas por el gobierno de Trump, la administración de Claudia Sheinbaum ha resaltado que protegerá a los connacionales que se encuentren en alguna situación en la que esté en riesgo su permanencia en el vecino país y para ello pueden recurrir a los consulados y, en caso de que sean deportados o quieran regresar voluntariamente al país, se les dará apoyo a través del programa ‘México te abraza’.
En el país preocupan las deportaciones masivas prometidas por Trump porque los mexicanos son cerca de la mitad de los 11 millones de indocumentados en Estados Unidos y sus remesas representan casi el 4 % del producto interior bruto (PIB) de México, que en 2024 habría recibido un récord estimado de 65.000 millones de dólares.