Después de ocho meses en que las obras de reconstrucción del muro fronterizo en el tramo de Tijuana, en Baja California, estuvieran suspendidas por órdenes del expresidente de Estados Unidos, Joe Biden, este viernes los trabajos para levantar la muralla antiinmigrante a lo largo de los 41 kilómetros lineales con el Condado de San Diego, del lado estadounidense, éstas fueron reactivadas por órdenes de Donald Trump.
Desde el primer día del gobierno del republicano la supervisión de los distintos tramos del muro fronterizo en la frontera común entre ambas naciones comenzó y este viernes el tramo que había sido suspendido en Tijuana, entre ellas la zona de la playa donde se encuentra la valla metálica que desemboca en el océano Pacífico reinició sus labores con máquinas excavadoras y trabajadores.
“El día de asunción de Trump, desde las siete de la mañana llegaron los trabajadores y comenzaron a extender el muro. Lo que no sabemos es de dónde sacaron los fondos, porque decían las autoridades que no había fondos para ello”, resaltó
Sobre la reactivación del muro fronterizo, el activista Daniel Watman, director de programas del Parque de la Amistad en Tijuana, resaltó que la reconstrucción del muro en estas áreas específicas son parte del plan de acción y contención de migrantes que reforzó el presidente Trump, con la intención de no permitir el ingreso de indocumentados hacia su país.
El activista apuntó que Trump “utiliza una retórica para que la gente se enoje y necesitan poner más muros y militarizar más, pero la verdad es que es parte de una industria que genera mucho dinero para mucha gente y no protege a nadie”.
En la misma línea, este defensor de los derechos de los migrantes refirió que “nuestra idea es que sea un parque en donde la gente pueda entablar amistades y las familias puedan estar juntas. Que sea un símbolo de lo que necesitamos y aprovechar de que tenemos un ecosistema compartido para mostrar al mundo que necesitamos colaborar a través de las fronteras para salvar nuestro planeta”, destacó.
Watman ha sido un férreo defensor del Parque de la Amistad, creado en 1971 por la entonces primera dama Pat Nixon en el límite fronterizo en Tijuana, como un símbolo de unidad entre ambas naciones y posteriormente fue utilizado como sitio para las reunificaciones familiares.
Sin embargo, desde la pandemia de 2020 este espacio del lado estadounidense se ha mantenido cerrado y sin acceso al público.
Asimismo, apuntó que con la llegada de Trump no saben qué futuro deparará a este parque, ya que no han tenido contacto con nadie de la nueva administración de EU. “Tenemos todavía un escrito de la administración pasada de Joe Biden, en el que se nos menciona que cuando sean terminados los dos muros, abrirían una puerta del segundo muro para dejar pasar a las personas de una forma muy restringida. Va a ser más que un parque, como una visita a prisión o algo así, pero tenemos nuestras dudas porque anteriormente no terminaron todo y fue el pretexto para no abrir esa puerta”, dijo. (Información de EFE)