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En un escenario de violencia insostenible y exigencias de renuncia, el gobernador de Sinaloa, Rubén Rocha Moya, presumió su afiliación como militante de Morena, cuya credencial de acreditación le fue entregada por el heredero del partido en el poder, Andrés ‘Andy’ López Beltrán, hijo del expresidente López Obrador, con se fotografió este sábado.
Roya Moya, a quien los culichis ya no quieren como gobernador, destacó en un mensaje en sus redes sociales su compromiso con la Cuarta Transformación, fundamentado, aseguró, fundamentado “en la honestidad, la justicia y la democracia”.
“Con el tiempo, el anhelo de un país más equitativo, se transformó en una lucha incansable por el bienestar de todas y todos. Paso a paso, este movimiento ha crecido hasta sumar a millones de mexicanas y mexicanos que hoy seguimos construyendo un futuro fundamentado en la honestidad, la justicia y la democracia. Reafirmo mi compromiso con la Cuarta Transformación, impulsada por el liderazgo de Andrés Manuel López Obrador y que hoy continúa con la visión y firmeza de nuestra presidenta, Claudia Sheinbaum Pardo. Es un gusto recibirte en Sinaloa, mi querido Andrés Manuel López Beltrán, y recibir mi credencial de afiliación. Seguimos trabajando con convicción y humanismo, poniendo siempre al pueblo en el centro de las decisiones”, fue el mensaje del mandatario estatal.
‘Andy’ López Beltrán viajó a Culiacán, capital sinaloense, donde participó en una asamblea para afiliar a mexicanos a este “movimiento-partido”.
Morena, que dirige María Luisa Alcalde, tiene la meta de afiliar a 10 millones de mexicanos que representan 38 por ciento de los electores que en junio de 2024 votaron por Claudia Sheinbaum Pardo para el cargo de Presidenta de México, quien obtuvo poco más de 36 millones de votos.
El pasado 9 de febrero, Sinaloa cumplió seis meses de violencia, medio año bajo alto poder de fuego de las facciones en disputa del Cártel de Sinaloa, que lideran los hijos de Joaquín ‘El Chapo’ Guzmán, y de Ismael ‘El Mayo’ Zambada.
