
El gobierno de Claudia Sheinbaum entregó a Estados Unidos 29 narcos, encabezados por Rafael Caro Quintero, el pasado 27 de febrero. Sin embargo, de acuerdo con un reportaje publicado el pasado viernes por el diario The New York Times, poco después de este operativo, el teléfono celular de la presidenta de México fue hackeado.
De acuerdo con el reportaje de Natalie Kitroeff, jefa de la oficina del periódico en la CDMX, El hackeo ocurrió en un momento crucial, justo después de una llamada entre Sheinbaum y el mandatario estadounidense, Donald Trump. En esa conversación, Trump expresó su respeto hacia Sheinbaum, calificándola de “dura” y elogiando su estrategia contra los cárteles. La entrega de los capos fue vista como una medida audaz y drástica contra el crimen organizado, enviando un fuerte mensaje sobre la seriedad de Sheinbaum en la lucha contra el narcotráfico.
“Poco después de la entrega, el celular de Sheinbaum fue hackeado, según varias personas familiarizadas con el asunto. Un portavoz de la presidencia mexicana declinó hacer comentarios”, señaló Kitroeff.
Asimismo, Kritoeff aseveró que dicha hipótesis de espionaje, fue corroborada por cuatro personas que estuvieron presentes durante la llamada entre ambos mandatarios en la que se acordó la entrega de los narcotraficantes. Cabe señalar que el pasado 5 de marzo, Sheinbaum señaló que esta importante decisión se tomó a partir de información del secretario de Seguridad, Omar García Harfuch, quien advirtió sobre la liberación de muchos de estos delincuentes, y no para mantener “contento” al gobierno estadounidense.
Luego, en una segunda llamada, el pasado 6 de marzo, se acordó el aplazamiento de las medidas arancelarias a los productos mexicanos comprendidos en el T-MEC hasta el próximo 2 de abril.
Este supuesto hackeo ha generado preocupación sobre la seguridad de la información personal de la presidenta a pesar de que la relación de Sheinbaum con Trump ha sido notablemente positiva, con Trump calificándola de “mujer maravillosa” y destacando su inteligencia y cooperación en temas como la migración y el fentanilo.
La cooperación entre Sheinbaum y Trump ha tenido implicaciones significativas. Trump pospuso los aranceles contra México hasta el 2 de abril, citando el respeto hacia Sheinbaum y su trabajo en la lucha contra las drogas.
A pesar de ello, otras medidas arancelarias sobre el acero y el aluminio entraron en vigor el 12 de marzo, afectando a México como tercer proveedor de acero de Estados Unidos.