En México no hay un sólo cargo público que no esté al alcance de ser desempeñado por una mujer, destacó la presidenta del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), magistrada Mónica Soto Fregoso.
Al dirigirse a las asistentes en el Conversatorio “El derecho de las mujeres y las niñas a vivir una vida sin violencia”, realizado en conmemoración del Día Naranja y en el marco de la Campaña Únete de la ONU, Soto Fregoso dejó en claro que “México puede decir que no hay espacios solamente reservados para hombres”.
En este espacio participó Minerva Josefina Tavárez Mirabal, fundadora y presidenta del partido Opción Democrática de la República Dominicana, hija de una de las hermanas Mirabal, asesinadas por Rafael Leónidas Trujillo por su activismo político contra el régimen dictatorial, el 25 de noviembre de 1960 en República Dominicana.
Es por ello que ese día, en todo el mundo, se conmemora el Día Internacional para la Erradicación de la Violencia contra las Mujeres, decretado oficialmente por la ONU en 1999. “Minerva Mirabal, tu mamá junto con tus tías nos han marcado en un compromiso mundial”, apuntó Soto Fregoso, tras señalar que las hermanas Mirabal se representaban como “mariposas” con todo lo que ellas significan: la transformación, la reivindicación y la lucha.
La magistrada presidenta destacó que los logros de las mujeres son producto de su lucha por reformas constitucionales en materia de igualdad y de una justicia con perspectiva de género, cuando abrió un espacio para entregarle a Tavárez Mirabal, también fundadora y presidenta del partido Opción Democrática de Dominicana, una edición de la Constitución (mexicana) “Violeta”.
Hoy, dijo la funcionaria, México tiene una Constitución “Violeta” con contenido favorable al reconocimiento y ejercicio de sus derechos, a la paridad, la igualdad y con artículos enfocados a eliminar la violencia de género y subrayó que cuando se trata de poner un alto a la violencia política hacia las mujeres, no hay lugar a las diferencias ideológicas, religiosas o de nacionalidad, porque todas se unen —aseguró— en una causa común a nivel mundial.
Al respecto, Minerva Josefina Tavárez Mirabal señaló que las mujeres no requieren vencer sino convencer y provocar una reflexión para ser protagonistas en la lucha que han llevado en los últimos 200 años, ya que es claro que tienen mucho que aportar.
Consideró como “un poderoso mensaje” el que una mujer haya recibido la Constancia de Presidenta de la República de manos de otra mujer, “que es posible romper cualquier techo de cristal”. Insistió que las mujeres deben pulsar e impulsar para que las que lleguen a un cargo de decisión, hagan la diferencia para las demás y, que ello, represente un cambio y transformación en la manera de hacer las cosas en cualquier espacio y a no dar por sentados los avances logrados