Nacional

Cáncer de mama: un diagnóstico temprano y oportuno: la diferencia entre la vida y la muerte

En México es la neoplasia de más alta prevalencia con más de 30 mil casos al año, y más de 8 mil muertes por esta causa

El cáncer de mama, es el más frecuente en mujeres, de ahí la importancia de la autoexploración, a fin de poder hacer detecciones en etapas tempranas

El cáncer de mama, es el más frecuente en mujeres, de ahí la importancia de la autoexploración, a fin de poder hacer detecciones en etapas tempranas

ARCHIVO

El cáncer de mama es una de las neoplasias más frecuente en mujeres a nivel mundial, y en el caso de México, se ha contabilizado una cifra que supera los 31 mil nuevos casos por año y lamentablemente en ese mismo periodo se registran más de 8,000 muertes, convirtiéndose en la principal causa de muerte en mujeres.

Es importante mencionar que datos de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) señalan que el cáncer de mama puede ser detectado y tratado a tiempo mediante programas de información, educación y asesoría con el objetivo de aumentar el conocimiento de las mujeres respecto de los factores de riesgo y los signos y síntomas que requieren atención médica inmediata, así como tener un acceso oportuno a un tratamiento adecuado.

El cáncer es una proliferación excesiva de células que se acumulan y forman tumores, con la característica adicional de que pueden salir del órgano donde se formaron y migrar a otra parte del cuerpo como: hígado, cerebro o huesos, con consecuencias letales.

En este contexto, la doctora Nuria Marcos, vicepresidenta asociada del área Médica para Lilly Latinoamérica, enfatizó que cuando una paciente es diagnosticada en etapa temprana su pronóstico de supervivencia será más alentador, y será más positivo al suministrarle el tratamiento correcto con una atención personalizada, aumentando las posibilidades de curación.

Asimismo, sostuvo que en la actualidad dados los avances científicos para el tratamiento del cáncer de mama en etapa temprana se puede mejorar la supervivencia global y mantener la calidad de vida.

Octubre, mes de la concientización contra el cáncer de mama, el IMSS llama a la autoexploración mamaria, para poder detectar a tiempo este tipo de tumores

A fin de lograr una detección temprana del cáncer de mama, es importante la autoexploración cada mes en todas las mujeres mayoes de 20 años 

ARCHIVO

Problema de salud pública, con enorme carga para el sector salud

La especialista refirió que lograr disminuir la posibilidad de vivir con cáncer de mama, también permitirá evitar gastos catastróficos en los pacientes, ya que tan sólo por tener una idea de los costos de tratamiento: “en el Informe al Ejecutivo Federal y al Congreso de la Unión sobre la situación financiera y los riesgos del Instituto Mexicano del Seguro Social 2022-2023”, el instituto estima necesario fortalecer la identificación de casos en etapas tempranas, para aumentar la supervivencia y evitar altos costos de tratamiento ya que el gasto para tratar el cáncer de mama en etapa avanzada alcalza los 593 mil pesos, considerando 2 años de tratamiento.

La prevención es clave

Debido a la alta prevalencia y mortalidad de esta neoplasia, es de suma importancia que todas las mujeres de 20 años en adelante tengan presente que a partir de esa edad deben comenzar las autoexploraciones cada mes, a fin de poder detectar alguna anomalía en las mamas. Lo más recomendable es hacerlo frente a un espejo a fin de poder identificar diferencias entre ambas mamas y con las yemas de los dedos palpar los senos, en caso de sentir algún pequeño bulto, acudir de inmediato a atención médica.

A partir de los 25 años o más, se debe acudir a realizar una exploración clínica de mamas por un médico calificado, en tanto que, para las mujeres a partir de los años, se tendrá que efectuar una mastografía como parte de la prevención de cáncer de mama, al menos una vez por año, y en caso de ser necesario, ya el médico determinará la necesidad de realizar una mastografía o un ultrasonido, para tener una mayor certeza en el diagnóstico.

Factores protectores y de riesgo

La doctora Nuria Marcos resaltó que sin duda alguna la lactancia materna ha sido considerado como un factor de protección contra el cáncer de mama, ya que diversos estudios han analizado la relación entre la lactancia y el riesgo de padecer cáncer de mama.

En años recientes, en el país se han llevado a cabo diversas “tetadas” y manifestaciones a favor de la lactancia materna.

La lactancia materna es uno de los factores de protección contra el cáncer de mama. Una mujer sin hijos que jamás amamantó, tiene mayor riesgo de desarrollarlo 

Cuartoscuro

Amamantar puede reducir el riesgo de contraer este tipo de tumor”, señaló, al tiempo que refirió que expertos en el tema han señalado que por cada 12 meses que una mujer amamanta a su bebé, el riesgo relativo de cáncer de mama disminuye 4.3%, y otro 7% por cada bebé amamantado. La lactancia materna reduciría la incidencia del cáncer de mama hasta en un 11%.

En cuanto a los factores de riesgo, señaló que uno inevitable es la edad, e incluso se ha encontrado que en algunos entornos de altos recursos con poblaciones que tienen una esperanza de vida larga el riesgo podría darse en 1 de cada 8 mujeres.

Por lo tanto, otro efecto protector para disminuir el riesgo de cáncer de mama es hacer ejercicio de manera regular, ya que la actividad física reduce la posibilidad de vivir con este tipo de tumor entre 25% a 40%, así como procurar evitar sobrepeso u obesidad, tabaquismo, así como el consumo de alcohol en exceso.

Al respecto, especialistas del Instituto Nacional de Cancerología (INCan), han señalado que entre los factores exógenos también se encuentran la contaminación y uso de hormonas anticonceptivas o como terapia de sustitución en la menopausia, aunque en este último caso se pueden ser modificables para disminuir el riesgo.

De ahí la importancia de estudios de rutina al menos cada año como la mastografía y el ultrasonido anualmente a partir de los 40 años. Quienes tienen antecedentes familiares de la enfermedad deben hacerse los estudios a partir de los 35 años.

Asimismo, datos del INCan señalan que en el país, poco más de 15 por ciento de los casos se detecta en etapa 1, que es un estadio temprano y frece mayores probabilidades de mayor número de años de sobrevivencia, a diferencia de ese 70 por ciento de los diagnósticos corresponde a tumores localmente avanzados, que tienen dimensiones superiores a los dos centímetros, o ya involucraron la axila, los ganglios regionales o ambas condiciones, por lo que su severidad es mayor.

La esperanza de vida disminuye conforme aumenta el tamaño del tumor; es decir, en etapa 1, las probabilidades de curación son de 95 por ciento, mientras que en etapa 3 se reduce a 70 por ciento.