Nacional

A dos años del asesinato de dos sacerdotes jesuitas, iglesia católica pide diálogo y escucha

La Iglesia Católica eleva la voz ante esos asesinatos y “una larga lista de muertes y desapariciones violentas” ocurridas en el país, que claman por un alto a la violencia y la impunidad

Iglesia católica pide diálogo y escucha, a dos años del asesinato de los sacerdotes jesuitas Joaquín y Javier y una larga lista de muertes y desapariciones violentas

Iglesia católica pide diálogo y escucha, a dos años del asesinato de los sacerdotes jesuitas Joaquín y Javier y una larga lista de muertes y desapariciones violentas

La Iglesia Católica del país recordó el asesinato de los sacerdotes jesuitas Javier y Joaquín, hace dos años, hechos que cimbraron e indignaron a México, de quienes “se dedicaban a querer a las personas”, y así lo demostraron hasta su último aliento.

En la editorial “A dos años de la muerte de Javier y Joaquín, pedimos diálogo y escucha”, publicado en el semanario “Desde la Fe”, se resaltó que las víctimas perdieron la vida en el altar de la iglesia de Cerocahui, a los pies de la imagen de San Francisco Javier y al lado de Pedro Palma, esposo y padre de familia, otra víctima inocente de la violencia en México.

Al considerar que dichas muertes, las cuales se han sumado “a una larga lista de muertes y desapariciones violentas que vienen aconteciendo en las últimas décadas en el país”, el llamado urgente que hoy se hace, es “a seguir el dialogo entre nosotros y con quienes firmaron los “Compromisos por la Paz”, como la virtual candidata electa a la presidencia de la República, Claudia Sheinbaum.

En este contexto, la Iglesia Católica recordó que decidieron “elevar la voz, a denunciar con más fuerza la violencia y la impunidad en México, nos han urgido a exigir acciones inmediatas y eficaces para dejar de sentirnos inseguros, para tener justicia y verdad, para alcanzar la tan ansiada paz”.

En la publicación se resaltó que obispos, religiosos, la dimensión de laicos y los jesuitas, junto a muchas personas de buena voluntad han sentido la llamada para construir espacios de esperanza “en donde no tuviera lugar ni la desolación ni el miedo; había que conversar, hablar de nuestras historias, dar lugar a las víctimas en nuestras comunidades y templos”.

Ante tal panorama, es que fue la propia Iglesia Católica que convocó a las jornadas de oración, foros, conversatorios y el Diálogo Nacional por la paz, realizado en septiembre de 2023, lo cual dio lugar a una serie de propuestas concretas expresadas en la “Agenda Nacional de Paz”.

Fue así como también surgieron “Los Compromisos por la Paz”, que fueron presentados y firmados por las candidatas y el candidato a la presidencia de la República, además de muchos otros contendientes a cargos públicos en el país, ante lo cual, el llamado ahora es a la virtual Presidenta electa de México, Claudia Sheinbaum Pardo, a atender la situación que vive el país.

El artesanal trabajo de construir la paz, sigue; y requerimos de pasos concretos y sostenidos que habrán de partir, como señala el Papa Francisco en Fratelli Tutti, del “acercarse, expresarse, escucharse, mirarse, conocerse, tratar de comprenderse, buscar puntos de contacto, todo eso que se resume en el verbo ‘dialogar’.

La sangre derramada en Cerocahui, y todo el sufrimiento de las víctimas de la violencia en México, desapariciones, desplazamientos forzados, nos conmueven y comprometen. Estamos convencidos de que “no hay punto final en la construcción de paz de un país, sino que es una tarea que no da tregua y que exige el compromiso de todos”.