La dirigencia nacional del PAN exigió al presidente Andrés Manuel López Obrador aclarar los señalamientos que hizo el supuesto líder del grupo criminal Los Ardillos que controlan amplias zonas en Guerrero, quien acusó que los Zetas presuntamente entregaron millonarias sumas de dinero para costear la campaña presidencial del tabasqueño en el 2006.
Asimismo, advirtió que la tolerancia del gobierno lopezobradorista con la delincuencia constituye una amenaza en el actual proceso electoral, tal como ocurrió en el 2021.
El líder nacional del PAN, Marko Cortés, sostuvo que “las revelaciones del jefe narco de “Los Ardillos” puede ser la pieza que faltaba para explicar, con total nitidez, el ofrecimiento en campaña de amnistía al crimen organizado y el verdadero origen de la política de ‘abrazos a los delincuentes’”.
“Que los Zetas presuntamente hayan entregado dinero a su campaña y que, además, hayan operado comités electorales a favor de Morena, confirmaría que el único objetivo de López Obrador siempre fue conquistar el poder, aunque fuera con el dinero del narco y aunque tuviera que entregar a cambio diputaciones, alcaldías u otros cargos de elección popular”, acusó.
Este jueves, el presunto líder de los Ardillos, grupo criminal en Guerrero, Celso Ortega, quien era miembro de los Zetas, reveló en una entrevista para Latinus, el supuesto financiamiento de ese cartel a la campaña presidencial de López Obrador en el 2006 y detalló los presuntos nexos que tienen con funcionarios de Morena como la presidenta municipal de Chilpancingo, Otilia Hernández.
El dirigente panista consideró que este testimonio del jefe criminal “el mismo que salió en video con la presidenta municipal morenista de Chilpancingo, es un clavo más en el ataúd de un gobierno que está bajo la mirada internacional por sus nexos con el narcotráfico y que ha merecido el repudio en las redes sociales, donde, de manera insólita, la etiqueta #NarcoPresidenteAMLO lleva 15 días en los primeros lugares de la lista”.
Indicó que el presidente tiene la obligación de aclarar, de manera puntual e inmediata, sobre estos nuevos señalamientos que apuntan a que líderes de la delincuencia entregaron a su campaña en 2012.
El dirigente nacional panista destacó que el objetivo de López Obrador siempre fue ganar la presidencia y, una vez en el poder, instaurar una dictadura mediante su inconfesable pacto con el crimen organizado y el desmantelamiento de los órganos autónomos, incluida la Suprema Corte de Justicia de la Nación y el Instituto Nacional Electoral, como lo confirman sus iniciativas enviadas a la Cámara de Diputados.
“Siempre hay que dudar de la palabra de un delincuente, pero el testimonio del jefe narco explicaría lo que está pasando no solo en Guerrero sino en todo el país, el río de sangre, con cerca de 180 mil homicidios dolosos, el fortalecimiento de los cárteles y la alianza electoral del crimen organizado con Morena en 2021, en un clima de amnistía y tolerancia por parte del gobierno”.
Todo esto explica —agregó— por qué Obrador no quiere que se quite el fuero al Presidente de la República, como lo propusimos de forma retroactiva y sin prescripción de delitos graves, en su caso está claro que “el que mucho debe, mucho teme”, señaló.
Cortés Mendoza añadió que el posible financiamiento del narco a la campaña de López Obrador también explica otras dos cosas: primero, la razón por la cual el gobierno federal le quitó a los municipios del país el presupuesto que tenían para fortalecer sus cuerpos policiales y también el conocido exhorto presidencial a los soldados para cuidar la vida de los narcotraficantes.
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