Nacional

Fumar cigarros electrónicos aumenta dos veces el riesgo de probar tabaco convencional

Empresas recurren a todas las medidas a su alcance para renovar a la población fumadora y que siga generando ganancias. Infantes y adolescentes corren mayor riesgo

vapeadores riesgo a la salud de infantes

Acusa  oposición  “intereses poco claros” . Se provocar un mercado negro

Los cigarros con cápsulas de sabores o los vapeadores son un riesgo para infantes y adolescentes, con quienes la industria tabacalera busca sustituir a fumadores que están muriendo por esta causa

Evidencia científica ha demostrado que niñas, niños y adolescentes que consumen cigarros electrónicos presentan el doble probabilidades de probar tabaco convencional, señaló Inti Barrientos Gutiérrez, investigador del Departamento de Prevención y Control del Tabaquismo del Instituto Nacional de Salud Pública (INSP).

Resaltó que la industria tabacalera considera a las y los adolescentes fumadores el remplazo de quienes fallecen por esta causa, debido a que el tabaco mata a la mitad de sus consumidores.

Así lo estableció en el curso “Proteger a la niñez de la industria del tabaco”, e indicó que estas empresas recurren a todas las medidas a su alcance para renovar a la población fumadora y que siga generando ganancias.

Señaló que en algún momento se consideró que fumar ya no era sexi, no daba estatus; tampoco estaba de moda y era una práctica que a los jóvenes comenzaba a parecerles más propia de viejitos, lo que llevó a la industria a buscar nuevas formas de obtener beneficios y las encontró con productos como las cápsulas saborizantes en cigarrillos convencionales, los cigarrillos electrónicos y vapeadores.

La comercialización de estos productos es promovida a través de estrategias publicitarias y de mercadeo basadas en narrativas que plantean que el consumo de estos productos “aumenta el atractivo personal, es más sexi, los hace ver a la moda, los convierte en alguien diferente, especial y facilita su aceptación en un grupo social determinado”.

El especialista sostuvo que esa narrativa la han reforzado con la presencia de productos de tabaco y nicotina en series y películas a través de plataformas de streaming; en videojuegos y otros productos de la industria del entretenimiento, así como en contenido de influencers en redes sociales.

Ello se engloban en una falsa idea de libertad, porque, de algún modo, al consumir estos productos la persona se está revelando contra la autoridad y contra el statu quo, lo que impacta sobre todo a niños, niñas y adolescentes.

Ello aunado al hecho de que la comercialización de cigarros electrónicos y vapeadores con forma de juguetes es otra de las estrategias de la industria tabacalera por captar consumidores cada vez más jóvenes.

El investigador del INSP también informó los resultados del proyecto de investigación Remap (REmoviendo el poder del MArketing de los cigarrillos para Proteger la salud de los adolescentes) en América Latina.

Dicho estudio mostró que, en México 51% de los puntos de venta ubicados cerca de escuelas no cumple la ley en lo relativo a publicidad y exhibición de productos de tabaco como cajetillas, e incluso se venden cigarros sueltos que son exhibidos junto con dulces, bebidas azucaradas y alimentos procesados, lo que hace que este tipo de productos nocivos para la salud aparentemente resulten más atractivos para los estudiantes.