
A los grupos parlamentarios de la Cámara de Diputados que plantean reformas constitucionales al Poder Judicial de la Federación, la ministra integrante del pleno de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), Yasmín Esquivel Mossa, pidió que se escuche a las y los juzgadores para integrar sus propuestas en la creación de una iniciativa de reforma.
Esquivel Mossa acompañó al ministro Javier Laynez Potisek, quien representó al Poder Judicial ante la Junta de Coordinación Política para recibir la primera parte de las conclusiones de los conversatorios referentes a la transformación del Poder Judicial, y señaló que las conclusiones son el fruto de un ejercicio de apertura del Poder Legislativo, que en la medida en que decidió compartirlo con miembros del Máximo Tribunal del país, “nos asegura una voluntad de colaboración para lograr el mejor resultado en esta tarea, de transformación de un Poder fundamental para la República”.
La ministra externó que los poderes judiciales deben ser aliados de la sociedad y que su fines satisfacer el interés superior de las necesidades colectivas por encima de intereses particulares, así como promover, respetar, proteger y garantizar los derechos humanos establecidos en la Constitución.“He sostenido en diferentes ocasiones la urgencia y pertinencia de reflexionar en una gran reforma estructural de los poderes judiciales, tanto federales como locales. Mi presencia este día ratifica mi convencimiento de que los tribunales judiciales no debemos ser ajenos a la crítica, ni menos desconocer que hoy la sociedad desconfía de la impartición de justicia. Es mi convicción (es decir) que estamos obligados a la autocrítica, a revisarnos y evaluarnos con apertura de mente, y verificar de fondo los cambios estructurales que necesitamos para responder a las exigencias que nos mandata el artículo 17 de nuestra Constitución General, que es la impartición de justicia completa, imparcial, gratuita y libre de todo formalismo”, destacó Yasmín Esquivel.
La ministra resaltó que la división de poderes no significa enfrentamiento, sino colaboración y diálogo para lograr un mejor país en beneficio de los mexicanos.
“Resulta de la mayor importancia que nos escuchen, porque tenemos mucho que aportar, nuestra experiencia en la aplicación de esas leyes y la que deriva del quehacer jurisdiccional que día a día llevamos a cabo”, pidió a la ministra a los líderes parlamentarios de Morena, PAN, PRI, PT, PVEM, Movimiento Ciudadano y PRD.
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