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Esta semana, el viernes 19 de julio, termina el ciclo escolar 2023-2024, de acuerdo con el calendario de la Secretaría de Educación Pública (SEP).
Aunque la mayoría de las escuelas privadas ya iniciaron en los hechos el descanso anhelado por los alumnos, las públicas seguirán recibiendo a los estudiantes hasta este martes 16 de julio porque los Maestros participarán en un Taller Intensivo de Formación Continua, sin sus estudiantes.
Los profesores y profesoras contarán en los hechos con un par de semanas de vacaciones, pues tendrán que trabajar anticipadamente al 26 de agosto, cuando iniciará el nuevo ciclo escolar 2024-2025.
Previamente del 19 al 23 de agosto de 2024, será realizada la Fase Intensiva del Consejo Técnico Escolar CTE, y el jueves 22 y viernes 23 de agosto se implementará la Sesión de Comité Participativo de Salud Escolar y Jornadas de Limpieza en la Escuela.
Aunado a esto, los Maestros del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), trabajarán lidereados por su secretario general, Alfonso Cepeda Salas, para acompañar al nuevo equipo que llegará a la SEP con Mario Delgado Carrillo.
Los docentes ya le plantearon al futuro titular de Educación la agenda que sigue pendiente desde el sexenio de Enrique Peña Nieto, reformas a la seguridad social para pensiones suficientes, y la promoción de su desarrollo profesional más allá de los 100 pesos anuales que tienen este año para este rubro.
El primer acto público de Mario Delgado para su nuevo encargo fue reunirse con el SNTE, y les expresó que la importancia que la presidente electa, Claudia Sheinbaum Pardo, y él darán al trabajo con ellos.
“Vamos a tener mucho trabajo por delante, por lo pronto empezarán los trabajos de transición, le pido al maestro Cepeda que estemos en constante comunicación, que estemos muy de cerca porque todo lo vamos a hacer de la mano de ustedes”, fueron las primeras declaraciones del próximo secretario.
El futuro titular de la SEP les dijo a los profesores algo muy relevante: “como lo prometió en campaña la doctora Sheinbaum Pardo, se revisará la permanencia de la Unidad del Sistema para la Carrera de las Maestras y los Maestros (USICAMM) y se buscarán pensiones dignas para los trabajadores de la educación que se jubilen”.
Se sabe que los secretarios generales seccionales y los Órganos Nacionales de Gobierno Sindical del SNTE están atentos para trabajar, dejando de lado el periodo vacacional, pues quieren hacer realidad la vieja petición de la desaparición de la USICAMM y lo que queda de su ley.
Como pocas veces, en esta petición coincide con el SNTE, su contraparte sindical la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), quien también exigió en mayo la desaparición de la unidad a la cual consideran una entidad dañina, injusta, obsoleta y corrupta.
Una Ley que nació sin vida
La Ley del Servicio Profesional Docente fue producto de la reforma educativa laboral de 2013, impulsada por el ex presidente Enrique Peña Nieto, decretada por el Congreso y publicada el 11 de septiembre de ese mismo año.
En ese modelo, que fue vendido mediáticamente como uno de avanzada y primer mundo, quedaron integrados los artículos que regularían el servicio profesional docente en educación básica y media superior, sus derechos y obligaciones, los perfiles parámetros e indicadores de las funciones, buscando además, transparentar estos procesos.
Cuando fue publicada la ley USICAMM, los Maestros desconocían las implicaciones y repercusiones que se derivarían en su contra, y las afectaciones al modificar súbitamente las reglas para poder ingresar a la docencia y desempeñarse en un sistema que apostó por privatizar la educación pública y culpar a los profesores de todos los males educativos del país, una falacia neoliberal.
A su arribo a la Presidencia de la República, la Cuarta Transformación hizo realidad la terminación de la “mal llamada reforma educativa”; así, el 27 de marzo de 2019 la ley USICAMM fue abrogada por decreto.
¿Cómo se dañó a los Maestros?
Desde hace más de 10 años Crónica ha documentado las injusticias paulatinas contra los Maestros, así como la petición de estos a partir de este sexenio para que desaparezca la USICAMM.
Ni la USICAMM; ni los secretarios de educación Emilio Chauyffet Chemor, Aurelio Nuño, Otto Granados, ni la pandemia, doblegaron el compromiso de los Maestros con la educación pública y los estudiantes en las aulas.
Los daños ocasionados por la ley USICAMM afectaron los derechos laborales de los docentes; ellos lo han dicho públicamente en distintos foros y momentos, incluso formularon un planteamiento formal y profesional ante la Cámara de Diputados.
La USICAMM facilitó el cese de los maestros que se opusieron a la “mal llamada reforma educativa”, las evaluaciones punitivas, las descompactaciones salariales, las plazas iniciales de docentes y directivos que requerían ser ratificadas, la desaparición del escalafón y las múltiples campañas mediáticas en contra del Magisterio, entre otras afectaciones.
La ley afectó la percepción social y la identidad de los Maestros, el acto educativo y la profesión de los educadores fue desgastada y juzgada socialmente y políticamente, múltiples periodistas a modo, opinólogos, legisladores en turno, y organizaciones de la llamada sociedad civil, iniciaron el cuestionamiento al trabajo docente expresando juicios subjetivos sobre su desempeño.
En el sexenio del presidente Andrés Manuel López Obrador fue iniciado un trabajo para recuperar la confianza social hacia los Maestros, un camino que sigue enfrentando desafíos y una condicionada revaloración hacia el Magisterio.
La Ley USICAMM anuló lo que establece la Constitución en el artículo 123, apartado B, fracción VIII, que indica que los trabajadores contarán con un escalafón a fin de que los ascensos se otorguen en función de los conocimientos, aptitudes y antigüedad.
La Ley promovió los exámenes estandarizados que favorecieron a los que destacaron por sus conocimientos, generando un orden de prelación, del cual se investigan los casos en que pudo haber corrupción, que ya no fueron concursos, ni públicos, ni abiertos.
Los que aprobaron exámenes y consiguieron plaza docente o un ascenso, vieron afectadas sus percepciones salariales y prestaciones si no aceptaron ser ratificados por más evaluaciones.
La Ley USICAMM afectó también frenó el crecimiento profesional docente y fueron generados con ello problemas de pago de carrera.
Los Maestros que lograron beneficios de carrera magisterial y ascendieron, hoy tienen un sueldo inicial que es indigno y no cubre las necesidades de una profesión en la cual casi todos los Maestros ponen de su bolsillo para poder trabajar correctamente en el aula.
Los profesores del SNTE han expresado también que las afectaciones de la Ley son diferentes en cada estado, nivel educativo, función que se desempeña.
Por ejemplo, Crónica documentó el caso del profesor Arnulfo Rodríguez Treviño, dirigente de la Sección 30 del SNTE, quien solicitó a la secretaria Irma Leticia Ramírez, crear una escuela Normal en la región de Altamira, Tamaulipas.
Él pidió que la Unidad del Sistema para la Carrera de los Maestros (USICAMM) sea regionalizada; “hemos tenido situaciones bien lamentables, es urgente darle garantía profesional y física a mis compañeros de Tampico; en la frontera laboran más de 300 maestros a los que no les queda absolutamente nada de su sueldo”, detalló el dirigente.
Rodríguez Treviño abogó por mejoras laborales para los maestros de Inglés, a quienes, dijo, “les han quitado 20 años de antigüedad”.
Procesos injustos y excluyentes
Los Maestros llegaron hasta el Palacio Legislativo para explicar lo que llamaron procesos “injustos, excluyentes, ineficaces, unilaterales y no permiten a los educadores ejercer el derecho a ser representados por su Sindicato; es una ley que no reconoce la bilateralidad”.
Los dirigentes del SNTE explicaron a los legisladores que la ley es “inequitativa, porque sus criterios para ascensos a puestos directivos son diferenciados; es injusta, porque atenta contra el derecho a la movilidad de los trabajadores”.
Añadieron que se ha convertido en una limitante en la aspiración legítima de los maestros a tener un salario y una vida dignos; y discrimina porque genera diferencias entre profesores de nivel Básico y Medio Superior.
Señalaron que también “excluye algunas categorías de docentes (artísticas, tecnológicas, educación física y psicólogos), además de modalidades educativas (Misiones Culturales y CECATI)”.
Durante sus exposiciones, los docentes y representantes sindicales coincidieron en que la USICAMM se ha convertido en el “verdugo de los maestros, pues no valora su trabajo, no facilita la profesionalización y desmotiva el ejercicio docente”.
Denunciaron que debido al excesivo burocratismo en los procesos que regula la USICAMM, en algunas escuelas del país todavía hay grupos sin profesores, lo que impide que niños y jóvenes ejerzan a plenitud su derecho a la educación.
Revalorizar al Magisterio
Por su parte, Flora Tania Cruz Santos, presidenta de la Comisión de Educación de la Cámara de Diputados, destacó el interés de los docentes de todo el país en el foro.
Dijo que se hallan ante la oportunidad de “crear condiciones, verdaderamente justas para los participantes en los concursos de promoción a plazas directivas del Sistema para la Carrera de los Maestros, y cumplir con revalorizar el magisterio”.
Por su parte la diputada Sonia Rincón Chanona dijo que la USICAMM impide al SNTE observar y verificar el respeto a los derechos de los trabajadores de la educación en los procesos de admisión, promoción y reconocimiento.
En su oportunidad, la legisladora Gabriela Martínez Espinoza se comprometió a revisar la ley de la USICAMM y, de requerirse, dar paso a su abrogación.
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