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Con un ligerísimo aumento de una décima, el Fondo Monetario Internacional (FMI) ubicó en 1.4 por ciento las previsiones de crecimiento de la economía de México para 2025 y por el momento mantiene sin cambios su estimación para el 2026 que es del 2 por ciento, según se desprende este viernes en su informe titulado “Perspectivas Económicas Globales”.
En su reporte el organismo financiero internacional de las Naciones Unidas destacó que “se espera que el crecimiento se modere aún más en 2025, derivado del retiro del estímulo fiscal y de una desaceleración de la economía de Estados Unidos”.
El FMI recordó que en noviembre pasado se renovó el acceso de México a la Línea de Crédito Flexible (LCF) por 35.000 millones de dólares al destacar la solidez de sus políticas macroeconómicas y de sus marcos institucionales de políticas públicas.
Asimismo, apuntó que en México “la actividad económica se está moderando, con una desaceleración del consumo privado y la inversión, y una disminución del crecimiento del empleo”.
AMÉRICA LATINA
En lo que respecta a la situación de la economía para la región de América Latina, el organismo financiero internacional mantuvo estable en 2.5 % su pronóstico para 2025.
Entre los mayores países de la región, el FMI mantiene su estimación de crecimiento del 2.2 % para Brasil y se espera un fuerte repunte de la economía argentina (5.0 %) después de la recesión de 2024.
En tanto, la ralentización de la economía de Brasil se producirá después de haber registrado un crecimiento robusto del 3,7 % en 2024, según los nuevos cálculos del FMI, que revisan siete décimas al alza la previsión divulgada el pasado octubre.
La directora gerente del FMI, Kristalina Georgieva, aseguró que la inflación está moderándose más rápido en las economías avanzadas que en las emergentes, y señaló que Brasil “enfrentó una inflación algo más elevada”.
Fuentes del FMI reconocieron que la principal preocupación del organismo internacional con relación a la economía latinoamericana es precisamente la presión inflacionaria en Brasil, algo que llevó al Banco Central a elevar los tipos de interés hasta el 12,25 % para tratar de contener los precios.