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Diversos organismos que integran el CCE viajaron este fin de semana a Washington para reunirse con sus contrapartes e intercambiar cifras sobre la relación comercial y el impacto que tendrán los aranceles.

Arrecia cabildeo IP en EU para frenar arancel a acero y aluminio

TMEC

El sector empresarial intensificará el cabildeo con su contraparte en Estados Unidos este lunes para tratar que México quede excluido de la medida arancelaria al acero y aluminio, que decretó el presidente Donald Trump a partir del próximo 12 de marzo.

“Respaldamos los esfuerzos del gobierno mexicano para lograr la exclusión de nuestro país de estos aranceles. Es fundamental que el diálogo prevalezca y que se busquen soluciones que respeten los acuerdos comerciales existentes”, comentó la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex).

El gobierno estadounidense ha justificado esta imposición bajo la Sección 232 de la Ley de Expansión Comercial, argumentando razones de seguridad interna. Sin embargo, la realidad es que estas medidas proteccionistas generan distorsiones en el comercio y afectan a sus propios socios estratégicos, aseveró.

Diversos organismos que componen al Consejo Coordinador Empresarial (CCE) viajaron este fin de semana a Washington para mantener reuniones con sus contrapartes, para intercambiar cifras sobre la relación comercial y que eventualmente podrían verse afectados entre socios, por los aranceles.

“La competitividad de América del Norte no puede verse comprometida por decisiones unilaterales que desconocen los beneficios de la cooperación regional”, dijo el organismo que encabeza Juan José Sierra.

EN RIESGO SECTOR AUTOMOTRIZ

Los aranceles al acero y aluminio mexicanos contravienen el T-MEC y ponen en riesgo la integración regional, especialmente en sectores estratégicos como el automotriz.

El anuncio del gobierno de Estados Unidos de imponer un arancel del 25% a las importaciones de acero y aluminio a partir del 12 de marzo, representa un golpe a la competitividad de América del Norte y una medida que contradice los principios del T-MEC, sostuvo.

La Coparmex rechazó esta acción que calificó de unilateral que afecta gravemente a la industria siderúrgica y a toda la cadena productiva vinculada a estos insumos esenciales.

Para el caso de México, las cifras evidencian la falta de justificación para esta decisión. En 2024, el balance comercial del acero entre México y Estados Unidos arrojó un superávit de 2.3 millones de toneladas a favor de la economía estadounidense.

Además, el 52% del acero que exporta Estados Unidos tiene como destino nuestro país, lo que evidencia el alto grado de integración productiva y la interdependencia de nuestras industrias.

“Resulta inaceptable que una decisión de esta naturaleza se tome sin considerar el impacto en la integración económica trilateral”, estableció

Los empresarios consideran que el impacto de esta medida será profundo, pues de acuerdo con datos de la Cámara Nacional de la Industria del Hierro y Acero (Canacero) se estima que el 75% de las exportaciones de acero mexicano van a Estados Unidos, poniendo en riesgo miles de empleos e inversiones en el país.

En caso de que esta medida no sea revertida, será indispensable que el gobierno de México implemente acciones de defensa comercial.” La industria siderúrgica nacional no puede quedar desprotegida frente a un ataque directo a su capacidad exportadora. En el caso de no poder llegar a un acuerdo, se deberán utilizar los mecanismos previstos en el T-MEC”, dijo.

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