
De la depresión a la euforia en cuestión de horas. Wall Street se disponía este miércoles a sufrir otro batacazo, cuando el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció por sorpresa que imponía una tregua de 90 días en sus aranceles más elevados para casi todos los países, excepto para China, a quien escaló en su chantaje arancelario hasta el 125%, luego de que Pekín lo elevara al 84% de todos los bienes procedentes de EU.
El índice tecnológico Nasdaq se disparó un 12% este miércoles, algo no visto desde 2001, en un cierre eufórico de Wall Street tras la pausa anunciada por el presidente Donald Trump en sus aranceles más elevados para la mayoría de países, aunque no para China.
Los otros dos índices batieron también récords: el S&P 500 escaló un 9.52%, y el Dow Jones un 7.87%, en un giro espectacular tras cuatro jornadas consecutivas de pérdidas.
Se trata de la mayor subida bursátil de un solo día desde 2001 para el Nasdaq, en plena burbuja de las ‘puntocom’; en el caso del S&P 500 se remonta a 2008, en plena crisis financiera, y en el del Dow Jones es el mejor desde 2020, tras la pandemia de covid-19.
Trump justificó su cambio de plan en que “la gente estaba empezando a ponerse nerviosa” y reconoció que ha estado observando la evolución de la bolsa, que describió como “apagada”, y de los “complicados” bonos del Tesoro, que daban señales de huida masiva de inversores a otros valores más seguros.
El bono del Tesoro a 10 años, cuyo rendimiento repuntó anoche hasta el 5.02%, un nivel no visto desde finales de 2023 y que sorprendió a los analistas, moderaba la subida hasta el 4.34%.
El crudo, también de fiesta
El petróleo de Texas, que operaba por debajo de los 57 dólares el barril (lejos de la barrera de los 60 dólares para que sea rentable extraerlo), también dio la vuelta y subió un 4.65%, para superar los 62 dólares el barril.
Mientras tanto, convertido desde hace un mes en valor refugio, escaló otro 4%, hasta 3,108 dólares la onza, y el bitcoin avanzaba un 7%, hasta 82,100 dólares.