Pese al testimonio de cientos de maestros despedidos sin justificación de las Universidades del Bienestar Benito Juárez (UBBJ), después de casi tres años de trabajo, el presidente Andrés Manuel López Obrador dijo ignorar la situación y se lavó las manos.
-¿Por qué se está corriendo a maestros de estas Universidades? -se le preguntó.
-No tengo información, pero aquí no se corre a nadie.
-Peso si son cientos y están peregrinando alrededor de Palacio Nacional…
-Hay que ver con Raquel Sosa, que es una mujer honesta, integra, incapaz de cometer una injusticia.
Durante los últimos días este diario ha ventilado la baja de cientos de maestros, cuyos derechos laborales fueron atropellados. Se les había obligado a firmar convenios por prestación de servicios educativos, para no reconocer su condición de trabajadores. Han laborado sin contratos, seguridad social ni prestaciones.
Los despidos les fueron informados por cartas. Y, conforme a diversos audios difundidos, Raquel Sosa, Coordinadora de las UBBJ, justificó: “Se buscaban mejores perfiles”, cuando desde el 2019, y en una evaluación reciente practicada hace apenas un par de meses, se había avalado su historial y conocimientos.
Sosa también los acusó de tener una “formación neoliberal”. Hoy, las actividades en algunas de las escuelas se encuentran paralizadas, por falta de personal docente.
Crónica cuestionó al presidente por qué las posturas encontradas de su gobierno: por un lado, se impulsa una ley en contra de la subcontratación (outsourcing) y se prometen plazas para maestros, médicos y enfermeras. Por el otro, se crean empleos internos, como en los casos de maestros de las UBBJ, piperos abocados a repartir combustible en terminales de Pemex y Servidores de la Nación, pero se les mantiene en la vulnerabilidad laboral: sin plazas, seguridad ni otros beneficios esenciales.
“Se termina la subcontratación y esto debe aplicar para el sector privado y para el sector público, se tiene que ir poco a poco basificando a los trabajadores del sector público, los que están por contratos, eventuales, es un plan que tenemos”, apuntó.
“Ya tenemos 400 mil maestros y trabajadores de la educación basificados, y se hará con médicos, enfermeras, trabajadores de la salud. Hoy aparece el boletín de una de las cámaras empresariales que nos está pidiendo esto, están demandando que servidores públicos sean basificados”.
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