Opinión

Educación transfronteriza

Educación transfronteriza

Educación transfronteriza

La Crónica de Hoy / La Crónica de Hoy

A seis meses del nuevo gobierno de Estados Unidos, es momento de analizar uno de los sectores estratégicos para el desarrollo de la región fronteriza: la educación, el cual ha comenzado a percibir los efectos de las políticas anti inmigrantes y de seguridad interna.

La región fronteriza es una zona estratégica para el sistema educativo estadunidense si consideramos que California y Texas son los estados con mayor población estudiantil, a la vez que son los dos estados con mayor porcentaje de población mexicana.

Aunado a lo anterior ambos estados cuentan con ciudades gemelas y puertos de entrada con grandes afluencias de migrantes, siendo el cruce de San Ysidro, el de mayor dinamismo a nivel mundial con más de 15 millones de personas cruzando anualmente por él.

Por estos cruces pasa la mayoría de estudiantes mexicanos que están inscritos en las escuelas estadunidenses con visas de estudiante. De acuerdo con el Sistema de Información de Estudiantes y Visitantes de Intercambio, de la Oficina de Inmigración y Aduanas (ICE), en 2016 un total de 16 mil 694 estudiantes mexicanos estuvieron inscritos con visas de estudiante en los colegios y universidades de Estados Unidos, los cuales provienen en gran medida de la zona fronteriza y cuyo tiempo de cruce alcanza hasta hora y media, dependiendo del punto fronterizo del que se trate.

Sin embargo, en las escuelas del lado estadunidense está ocurriendo un fenómeno muy particular: la baja de estudiantes mexicanos en todos los niveles educativos debido a que los padres de familia consideran que al incrementar el peligro de la deportación deciden sacar a sus hijos de las escuelas estadounidenses de la región fronteriza e inscribirlos en las escuelas mexicanas.

Esto está provocando un gran número de bajas si se considera que cerca del 80% del total de la población estudiantil de esas escuelas la componen alumnos mexicanos que estudian allá; así también, debido a que el sistema educativo estadounidense otorga recursos por número de alumnos, esto ocasiona que al bajar la cuota por estudiante, los recursos comiencen a perderse, constituyendo una de las preocupaciones más importantes de las autoridades educativas estadunidenses.

Para Texas el panorama se complica todavía más, ya que el estado sufrió recortes en grandes áreas, incluida la educación, debido a la no aprobación del proyecto de ley HB21, con lo cual las escuelas públicas pierden 1.6 mil millones de dólares que habrían aumentado la financiación por estudiante para casi todas las escuelas públicas y chárter.

Finalmente, sólo se podrá hacer frente a este nuevo reto en materia de educación transfronteriza si se fortalecen los sistemas educativos de ambos países, así como los programas establecidos, como el Programa Binacional de Educación Migrante que ha resultado exitoso en el estado de Baja California. Al mismo tiempo, es de vital importancia que los problemas de la educación transfronteriza sean atendidos desde una perspectiva binacional cuyo objetivo principal es el de alcanzar una educación binacional de calidad.

cpi@prodigy.net.mx