Bosque de Aragón, el descuidado pulmón de la CDMX

En el abandono, sin muestras de mantenimiento periódico y con instalaciones en proceso de deterioro, así luce el Bosque de Aragón, otro de los pulmones de la Ciudad de México que ve como sus áreas verdes comienzan a adoptar muestras de matorrales, mientras que el lago artificial, uno de los atractivos del lugar, luce desangelado, sin las lanchas características que invitaban a recorrerlo, al estar contaminado con agua sucia y basura, lo que aleja a los visitantes y es a la vez una tarjeta de invitación para los delincuentes.

“Hay basura tirada en todos lados, no cortan el pasto ni las plantas, se ve abandonado, es muy triste ver a los patos, aves y peces en agua sucia. Entiendo que también es responsabilidad de los visitantes ‘no tirar basura’, pero no es posible que se tenga tan descuidado este lugar”, comentó a Crónica un visitante del Bosque de Aragón, quien sin ocultar su molestia, dijo que este sitio, donde se ejercita todos los días, es uno de los pocos pulmones que tiene la ciudad y lo estamos echando a perder.

El pasado fin de semana, la lefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, dijo que continúa la rehabilitación del Bosque, sin embargo, un año después de la entrega de la primera parte de la rehabilitación, este importante centro ecológico está descuidado.

Crónica realizó un recorrido por el Bosque de Aragón y constató que las áreas de esparcimiento como gimnasios al aire libre, juegos infantiles, la trota-pista, la ciclovía, el área de patinaje y las palapas son los lugares más concurridos por los visitantes, pero en muchos de estos sitios el descuido es notorio, con pasto sin podar, basura en varios lugares, menos en los botes destinados para ello.

Cubrebocas, botellas de plástico y envases desechables se encuentran en las áreas verdes del Bosque, incluso en las orillas del lago, peces y aves nadan entre basura. Es lamentable que los ciudadanos no se preocupen por depositar la basura en su lugar estando los contenedores de basura vacíos.

El bosque de San Juan de Aragón fue creado en 1964 y cuenta con 162 hectáreas, 114 de ellas destinadas a áreas verdes, y en el resto, hay espacios culturales y recreativos. El Bosque de Aragón es una de las áreas verdes más importantes de la CDMX, y es el segundo centro ecológico más visitado en la ciudad, después del Bosque de Chapultepec.

En febrero del 2021, como parte del proyecto “Sembrando Parques”, Sheinbaum entregó la primera parte de la rehabilitación del Bosque, donde se invirtieron 118 millones de pesos; esta rehabilitación duró seis meses y contempló 18.67 hectáreas, en las que se reforestó un área de 8 mil 241.93 m2, donde se sembraron 2 mil 500 árboles y 27 mil 718 plantas, se instalaron 199 pozos de absorción, se habilitó un vivero, un parque canino, un nuevo humedal artificial, además se rehabilitó la trota-pista, la ciclovía y se instalaron cerca de 600 luminarias solares.

Usuarios entrevistados por este diario denunciaron que no es posible que, siendo un espacio tan importante en la ciudad, el lugar esté descuidado y que quienes lo tienen bajo su responsabilidad no se encarguen de dar mantenimiento al lugar, al lago y los humedales, siendo habitad natural de muchas aves migratorias.

En el Bosque albergan más de 15 especies de aves y según información de la Secretaría del Medio Ambiente (Sedema), hay más de 135 especies de aves locales y migratorias. A pesar del espectáculo de las aves, los visitantes no se preocupan por contribuir a la conservación de este, ya que independientemente del mantenimiento, hay basura tirada en varias partes del lugar.

“Si no pueden pagar gente de intendencia, se deberían realizar jornadas para recoger basura, creo que muchos estaríamos dispuestos a ayudar para tener limpio el Bosque, además, hay niños que dejan basura y sus padres no les dicen nada, por lo que con las jornadas se podría impulsar a que los pequeños aprendan a cuidar el medio ambiente, es triste, pero como a niños chiquitos, nos hacen falta más letreros que nos exhorten a mantener limpio el lugar”, señaló muy propositiva una asidua visitante del Bosque, quien junto con su perro, comenta, realiza caminatas por este coloso verde.

Cabe mencionar que los visitantes no sólo se quejan del descuido del lugar, sino de muchas personas que llegan al Bosque de Aragón y no depositan la basura en donde tiene que ir, a lo que se suma el excesivo cobro en el estacionamiento, que es de 40 pesos de una a tres horas.

“Quienes corremos diario aquí preferimos dejar el carro afuera del estacionamiento del Bosque, ya que con los ‘viene viene’ te cobran 15 pesos”, dijo un señor que realizaba ejercicios de calentamiento antes de su sesión de correr por varios kilómetros en la trota-pista.

En el Bosque, muchos trabajadores continúan con sus tareas de remozamiento y hay muchas áreas clausuradas.

En el 2008, el Bosque de Aragón fue declarado área de valor ambiental por el gobierno capitalino y es considerado uno de los pulmones de la Ciudad de México y los visitantes, agradecen la iniciativa que se tuvo de rehabilitar el Bosque pues a pesar de los inconvenientes, es un lugar donde pueden disfrutar de sus actividades favoritas.