Cultura

Hace 500 años Hernán Cortés pisaba por primera vez suelo mexicano

Ruta. Crónica presenta una cronología de la expedición acompañada de un mapa informativo en Google Maps y sustentada en los libros Historia verdadera de la Conquista de la Nueva España, de Bernal Díaz del Castillo; Hernán Cortés, de José Luis Martínez; y La conquista de México, de Hugh Thomas

Ruta. Crónica presenta una cronología de la expedición acompañada de un mapa informativo en Google Maps y sustentada en los libros Historia verdadera de la Conquista de la Nueva España, de Bernal Díaz del Castillo; Hernán Cortés, de José Luis Martínez; y La conquista de México, de Hugh Thomas

Hace 500 años Hernán Cortés pisaba por primera vez suelo mexicano

Hace 500 años Hernán Cortés pisaba por primera vez suelo mexicano

La Crónica de Hoy / La Crónica de Hoy

Hace 500 años el español Hernán Cortés (1485-1547) inició su viaje a territorio mexicano. Este personaje salió de Cuba rumbo a Cozumel con 11 navíos desobedeciendo la orden del entonces gobernador de la isla, Diego Velázquez: no conquistar, sólo explorar. Hernán Cortés zarpó y así comenzó el periodo de la Conquista de la Nueva España.

Crónica presenta una cronología de la expedición acompañada de un mapa informativo en Google Maps  recreado a partir de tres obras: Historia verdadera de la Conquista de la Nueva España, de Bernal Díaz del Castillo; Hernán Cortés, de José Luis Martínez; y La conquista de México, de Hugh Thomas.

Antes de que Cortés llegara a Cozumel, los tres autores describen la participación de éste con Diego Velázquez en la conquista de Cuba, lugar donde se conocieron; sin embargo, al poco tiempo su relación se deterioró.

En ese momento Cortés preparó su viaje al área maya y abandonó la isla un 10 de febrero de 1519, según escribió el cronista español Bernal Díaz del Castillo (1495-1584) en Historia verdadera de la Conquista de la Nueva España. En esas crónicas, el autor menciona que Cortés partió a Cozumel con 11 navíos grandes y pequeños; 32 ballesteros, 13 escopeteros y mucha pólvora.

“Y en diez días del mes de febrero de mil quinientos diez y nueve años, después de haber oído misa, nos hicimos a la vela con nueve navíos por la banda del sur, y con dos navíos por la banda del norte”, escribió.

Según el historiador británico Hugh Thomas (1931-2017), Cortés llegó a tierras mexicanas con 11 buques, 530 hombres, 13 caballos y 14 piezas de artillería, siendo el gobernador de Cuba, Diego Velázquez, quien financiara la expedición.

El humanista mexicano José Luis Martínez (1918-200/) precisa en su libro Hernán Cortés, que en 1519 Cortés tenía 34 años y que sabía algo de latín.

“En sus quince años en las islas Española y de Cuba, había aprendido algo de administración agrícola, rudimentos mineros, práctica jurídica municipal y había tenido sus primeras acciones de armas que lo habían mostrado valiente y decidido”, escribió.

Además, señala que la salida de Cuba fue entre el 12 y 18 de febrero de 1519 y la llegada del español a Cozumel, hacia el 27 de febrero. El autor agrega que uno de los objetivos de ese viaje era encontrar al expedicionario español Juan de Grijalva quién partió a México en 1518.

Una vez que Cortés llegó a Cozumel, el historiador Hugh Thomas detalla que una tercera parte de los hombres de la tropa ya habían estado en Quintana Roo con Grijalva, pero para Cortés era una tierra extraña.

“El templo dedicado a la diosa del arcoiris, Ix Chel, con su santuario recubierto de paja en lo alto de una pirámide de numerosos escalones, constituyó una novedad como lo fueron también la extraña miel, las inesperadas frutas, las nuevas legumbres y los pájaros marinos”, indicó.

Díaz del Castillo narra que Cortés preguntó a los mayas sobre el paradero de los españoles que viajaron con Grijalva y la respuesta fue que algunos eran esclavos. Entonces empezaron las negociaciones pero éstas se complicaron por la destrucción de templos prehispánicos y la colocación de cruces.

“Había allí en Cozumel unos ídolos de muy disformes figuras, y estaban en un adoratorio en que ellos tenían por costumbre en aquella tierra, por aquel tiempo, de sacrificar. Y una mañana estaba lleno un patio, donde estaban los ídolos, de muchos indios e indias quemando resma, que es como nuestro incienso”.

Y continúa: “Luego se subió encima de un adoratorio un indio viejo con mangas largas, el cual era sacerdote de aquellos ídolos (…)  y comenzó a predicarles un rato. Y Cortés y todos nosotros mirándolo en qué paraba aquel negro sermón. Y Cortés preguntó a Melchorejo, que entendía muy bien aquella lengua y supo que les predicaba cosas malas”.

Después Cortés sugirió poner una imagen y una cruz pero la respuesta de los indígenas fue negativa. “Y luego Cortés mandó que los despedazásemos y echásemos a rodar unas gradas abajo, y así se hizo. Y luego mandó traer mucha cal y se hizo un altar muy limpio donde pusimos la imagen de Nuestra Señora”.

Este es el primero trabajo que se

publicará en torno al arribo de

Hernán Cortés a México y la Conquista.