Opinión

IVA y frontera

IVA y frontera

IVA y frontera

La Crónica de Hoy / La Crónica de Hoy

En la columna anterior se habló de la importancia de la correcta instrumentación de la zona franca en la frontera México-Estados Unidos, por lo que esta entrega dedicará un espacio a una segunda propuesta, complementaria de la primera, consistente en la reducción del Impuesto al Valor Agregado (IVA), del 16% al 8% en la denominada zona franca de 30 km. de extensión.

Sin duda, es un tema que genera expectativa e incertidumbre a la vez, ya que, por un lado, se espera la promoción del desarrollo económico regional derivado de la atracción de inversión extranjera y de los beneficios tributarios que obtendrán los empresarios y consumidores, pero por el otro, está la duda de cómo implementar esta medida en la diferentes regiones fronterizas, acorde con sus demandas y necesidades; a nivel nacional cómo subsanar el déficit fiscal y los daños al erario público que se generarán en materia de recaudación de impuestos, y a nivel bilateral, cómo afectará en la búsqueda de acuerdos y cooperación transfronteriza.

A nivel local, algunas ciudades como Ensenada ya manifestaron su preocupación de quedar fuera de la zona franca y de la consecuente disminución del IVA, ya que la inflación sería una de las primeras consecuencias que provocarían un efecto recesivo y la consecuente pérdida de competitividad frente a otras zonas fronterizas.

A nivel nacional, el principal efecto que se presentaría sería en materia de recaudación de impuestos, específicamente de IVA. Tomando como base el año 2013, cuando el IVA en la frontera era del 11%, el gobierno federal recaudó 556,794 millones de pesos (mdp), mismo año en que tuvo una pérdida de 15,841 millones de pesos como consecuencia de esta medida, mientras que, en 2014, cuando se homologó el IVA al 16% en todo el país como consecuencia de la reforma fiscal, la recaudación creció a 667,085 mdp.

Al cierre de 2017, esta cifra incrementó a 816,039 mdp, por lo que, la reducción del IVA en la zona franca fronteriza, generaría daños al erario público en materia del presupuesto de egresos, aún mayores a los experimentados en 2013, y contribuiría a la generación de posibles malas prácticas fiscales por parte de las empresas.

Finalmente, para la implementación de esta medida es importante considerar el impacto que tendrá en todos sus niveles, ya que si bien es cierto generará el dinamismo regional anhelado durante los últimos años, también tendrá un costo fiscal mayor al contemplado en años anteriores, sin dejar de mencionar que, en su instrumentación, el factor binacional representa un elemento coyuntural para el desarrollo de la región compartida por ambos países, por lo que, deberemos estar atentos en 2019 a lo que representará por un lado la disminución en la recaudación, y por otro, el aumento en inversión y consumo.

cpi@prodigy.net.mx