Opinión

Movilidad social en México, el verdadero reto de AMLO

Movilidad social en México, el verdadero reto de AMLO

Movilidad social en México, el verdadero reto de AMLO

La Crónica de Hoy / La Crónica de Hoy

Recientemente la OCDE alertó sobre el alarmante estancamiento de la movilidad social, como resultado del aumento acumulado de la desigualdad de los ingresos que data desde los años noventa en el informe A Broken Social Elevator? How to Promote Social Mobility (¿Un elevador social descompuesto? Cómo promover la movilidad social).

Afirma que, considerando los actuales niveles de desigualdad y la movilidad intergeneracional de los ingresos, un niño de una familia pobre necesitaría por lo menos cinco generaciones para alcanzar un nivel medio de ingresos, en promedio de los países miembro. Revela también que las perspectivas de movilidad salarial entre las generaciones, suelen ser más desfavorables en los países donde la desigualdad en los ingresos es alta, y más favorables en los países con menos desigualdad.

Durante un periodo de cuatro años en que se realizó el análisis de este estudio, alrededor del 60 por ciento de las personas permanecen atrapadas en la categoría de ingresos más baja del 20 por ciento. Al mismo tiempo, uno de cada siete de todos los hogares de clase media y una de cada cinco personas que viven cerca de los ingresos inferiores, caen al 20 por ciento inferior de la escala de ingresos.

Llama la atención que en la mayoría de los países existe una creciente percepción de que el patrimonio y ventajas salariales de los padres, juegan un papel determinante en la vida de las personas. Para el caso de nuestro país, la fortuna de los padres tiene un rol fundamental en ese sentido. De acuerdo a las notas para México, uno de cada dos mexicanos nacidos en la pobreza continuará en esa situación durante toda su vida. De acuerdo al informe, el 52 por ciento de los niños cuyos padres tienen un alto nivel socioeconómico alcanzan ellos mismos un estatus socioeconómico alto, sólo el 3 por ciento cae al 20 por ciento inferior de la escala de ingresos.

Se refiere también que en la sociedad mexicana la movilidad social está directamente vinculada a la educación. Es decir, el nivel de educación de los padres tiene un fuerte impacto en los resultados educativos de sus hijos. Por cada año de educación adicional de los padres, está vinculado con seis meses adicionales de educación para sus hijos, aunque actualmente este vínculo está disminuyendo, y es más pequeño en las generaciones de padres jóvenes.

En comparación con otros países de la OCDE tenemos un desempeño bajo en términos de movilidad educativa intergeneracional y de movilidad de ingresos a lo largo de la vida en la parte superior de la escala de ingresos. Estos bajos niveles se atribuyen a factores como los altos niveles de pobreza e informalidad, las bajas tasas de participación femenina en el mercado laboral, la insuficiente calidad educativa en las áreas más desfavorecidas y la exclusión financiera, los cuales impiden a los mexicanos pasar de los niveles inferiores a los medios

Ante esta situación, la política social deberá convertirse en un catalizador que alivie estas cargas asociadas a las condiciones desfavorables en el comienzo de la vida. Para ello es necesario invertir en educación, salud, inclusión laboral y financiera.

Sin embargo, el presupuesto será un factor determinante y no existe mucho margen de maniobra para aumentarlo. En una investigación realizada por el Centro de Estudios Espinoza Yglesias se reveló que en el contexto actual (2018) el financiamiento de la seguridad social universal requiere de recursos tributarios adicionales por un valor equivalente a aproximadamente 2.4 por ciento del PIB. Plantean que para tener una fuente recurrente de financiamiento para un gasto también de carácter recurrente, es necesario la aplicación del IVA a todos los bienes.

Con las medidas anunciadas de disminuir el IVA en la frontera, la volatilidad de los precios internacionales de los combustibles y el tiempo del proceso de la inminente reforma educativa, difícilmente el gobierno entrante contará con el presupuesto para financiar la política social, lo cual se convierte en un gran reto o en un inminente dique que imposibilitará aumentar la movilidad social y la disminución de la desigualdad salarial.

Senadora de la República

Michoacán de Ocampo

@RocioPinedaG